Hoy en día, la gastronomía peruana es una de las más reconocidas a nivel internacional. No en vano tenemos al mejor restaurante del mundo, Central, el cual encabeza el prestigioso ranking The World's 50 Best. A pesar de que nuestra cocina se ha hecho un nombre en la escena culinaria global, hace unos años, en el extranjero no era conocida. Incluso, en muchos casos, pasaba desapercibida. Al respecto, el chef peruano Ernesto Noriega contó una desafortunada anécdota durante su estadía en Francia.
El hecho, aunque lo dejó consternado, no lo amilanó y, por el contrario, lo motivó a difundir la cocina nacional.
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Según relató Ernesto Noriega en una entrevista para el canal de YouTube Plus 51, durante sus estudios de cocina en Francia, se aventuró a preparar un seco, un plato típico de la gastronomía peruana. Sin embargo, jamás anticipó la reacción que tendría su profesor al intentar elaborar este platillo.
"Me tocó cocinar para todos los alumnos de la escuela un día porque te toca un día cocinar a todos los alumnos de la escuela. Y dije voy a hacer seco, le pedí al chef, le dije necesito culantro y me trajo semillas de culantro y dije no, necesito la hoja y aquí es carísima. Allá usan otra hoja", comentó.
Como al chef peruano no le daban el ingrediente que pedía, este insistió nuevamente; no obstante, la respuesta de su docente lo dejó impactado.
El chef peruano contó cómo se instruyó en cocina en Francia. Foto: Plus 51/YouTube
"Yo necesito un atado (del culantro) y me trajo una cosita así, como que pepitas. Y él me dice: 'Pero igual si nadie conoce la comida peruana'. Así me chocó y le dije: 'Ah, ya'. O sea, me quedé callado. No le iba a faltar el respeto a un chef", agregó.
Noriega precisó que, cuando ocurrió este hecho, era el 2008. Además, también contó otra anécdota con el mismo profesor francés que lo dejó consternado.
"Vio mi cara, vio mi reacción y todo esto (…). A la siguiente vez me tocó en el almacén, un curso, y él estaba haciendo la demostración o el reconocimiento de productos y justamente era de la papa y me dice, bueno, que hable el peruano sobre papa (…). Ya me tenía esta medio bronca", indicó.
Finalmente, aunque el cocinero dejó en claro que jamás sufrió discriminación cuando estaba en la escuela de cocina en Francia, sí resaltó que sufrió un "maltrato extraño".