Intel, una de las más importantes compañías fabricantes de microprocesadores en el mundo, ha sido una de las que más ha sufrido las consecuencias de la escasez de semiconductores a nivel mundial. Aun así, su situación es compleja por sí misma y un reciente informe lo revela.
La empresa ha revelado su informe financiero con respecto al primer trimestre del 2021 (Q1) donde se evidenció una fuerte caída con respecto al mismo periodo hace un año.
Los ingresos GAAP (referidos así por la contabilidad estadounidense) son de 18.570 millones de dólares, lo que representa una aparatosa caída de hasta el 41% con respecto a lo ganado en el primer trimestre del 2020.
De este resultado, se infiere una cantidad neta de 3.400 millones de dólares, lo que significa que las ganancias por acción se redujeron hasta en un 37%.
El informe reveló un porcentaje aproximado de los ingresos que obtuvo Intel por cada rubro. Por ejemplo, el mercado de computadoras de consumo representó el 8% de las ganancias, un 20% fue gracias a los centros de Datos un 20%, un 4% por los negocios del internet de las cosas (IoT) y un 6% de la división Mobileye.
Pat Gelsinger, CEO de la compañía, comentó al respecto: “Intel ha obtenido unos sólidos resultados en el primer trimestre gracias a la excepcional demanda de nuestros productos líderes y a la excelente ejecución de nuestro equipo. La respuesta a nuestra nueva estrategia IDM 2.0 ha sido extraordinaria, nuestra hoja de ruta de productos está ganando impulso y estamos avanzando rápidamente en nuestros planes con un enfoque renovado en la innovación y la ejecución”.
El ejecutivo apuntó que el 2021 es un “año crucial” para Intel, pues están sentando bases estratégicas para acelerar el crecimiento explosivo de semiconductores. Recordemos que, en los últimos tiempos, la compañía se ha visto superada en la carrera de microprocesadores de nanómetros más reducidos.