¿Alguna vez te ha empezado a sangrar la nariz en la calle o en tu cuarto y has entrado en pánico? Aunque una hemorragia nasal pueda parecer grave y aterradora, no siempre es una señal para alarmarse, ya que la mayoría de veces se produce por el daño o rotura de alguno de los vasos sanguíneos que circulan por la nariz y no representan una pérdida importante de sangre.
PUEDES VER: ¿Cómo eliminar las manchas oscuras en el cuello, axilas o entrepierna, y por qué aparecen?
De hecho, cualquier agente que genere irritaciones nasales, como las producidas por procesos catarrales o gripales, por manipulaciones con dedos o pañuelos o por traumatismos puede favorecer o provocar una hemorragia nasal.
De acuerdo con la Guía de Primeros Auxilios del Ministerio de Salud (Minsa), debes seguir las siguientes instrucciones para controlar una hemorragia nasal de forma eficiente y segura:
Aunque la mayoría de personas recomienda echar la cabeza hacia atrás, esto es un error, porque al hacerlo podemos provocar que la sangre se dirija hacia la garganta, lo que a su vez puede generar náuseas, vómitos o incluso que te atragantes con tu propia sangre. Lo correcto es inclinar la cabeza hacia delante y dejar que la sangre salga por la nariz.
Hemorragia nasal. Foto: Salud180
PUEDES VER: ¿Por qué no debes cepillarte inmediatamente luego de comer y cuánto tiempo debes esperar?
Ten en cuenta que tragar sangre puede irritar el estómago y causar vómito. Asimismo, el vómito podría hacer que el sangrado empeore o hacer que este se origine nuevamente. Escupe la sangre que se acumula en la boca y en la garganta en lugar de tragarla.