Augusto Álvarez Rodrich conversó con el expresidente del Consejo de Ministros, Pedro Cateriano, sobre la inhabilitación por cinco años a Zoraida Ávalos, la aprobación de la presidencia remota y otras noticias vinculadas al Congreso y al contexto político. Sobre el caso de Ávalos, el conductor de "Claro y directo" comentó cuál es el impacto de su inhabilitación en la institucionalidad.
"Yo no tendría ninguna razón para salir en defensa de la señora Zoraida. Es más, durante su gestión se han abierto y reabierto casos en la Fiscalía sin nuevas pruebas en temas que la Fiscalía ya había resuelto (...), y, debido a que ella mantuvo durante meses encarpetada una investigación contra mí, ahora se ha reabierto nuevamente. O sea, que desde el punto de vista personal, no tendría por qué salir en una defensa política de la doctora Ávalos", aclaró sobre su perspectiva frente a este caso.
"Mi defensa es principista. Creo que el Congreso ha intervenido groseramente en una decisión fiscal, que es una amenaza al sistema de justicia, porque, bajo la lógica jurídica inconstitucional que ha aplicado el Congreso, el Parlamento le está enviando un mensaje a todos los jueces y fiscales del país: cuando ellos no interpreten sus resoluciones de acuerdo a su pensamiento político, van a tener las mismas consecuencias que le han aplicado a la fiscal Zoraida", continuó.
Asimismo, se refirió a los extremos de las corrientes políticas y la responsabilidad que han tenido en cuanto a las decisiones que el Parlamento ha tomado. "Es muy claro que la extrema derecha y la extrema izquierda se unen, porque acá no podemos imputarle esto solo a la derecha, como lo ha ido sosteniendo falsa y reiteradamente la izquierda. Acá hay una alianza siniestra entre los extremos del Parlamento: de derecha e izquierda", aseveró el extitular de la PCM.