Nos sorprende el científico futurista Raymond Kurzweil autor del libro The Singularity is Nearer, quien señala que se está llevando a cabo la fusión de la biotecnología con la inteligencia artificial. Este acontecimiento conduciría a que la nanotecnología, para el año 2050, pondría a los humanos en etapa de singularidad tecnológica, que permitiría “superar las limitaciones de nuestros órganos biológicos”.
La singularidad, que quiere decir excepcionalidad, rareza, particularidad, excelencia, peculiaridad, marca momentos especiales en la evolución e historia del universo y la humanidad. Fue en momento de singularidad que adquirieron existencia y significado espacio y tiempo, al originarse el universo. Ahora pasa lo mismo con el avance incontenible de la tecnología, que está modificando el curso de la vida en el planeta.
Señala Kurzweil que “nuestro cuerpo acumula errores cuando las células se reproducen una y otra vez, lo que lleva al daño”. Entonces, tal daño podría ser reparado con la participación de los nano-robots. Esto requiere de la presencia de una tecnología superior, a lado de la inteligencia artificial. La tecnología superior corresponde a electrónica, robótica, nano-robótica, energía cuántica y biología molecular.
Continuando el desarrollo de la nanotecnología se podría atacar drásticamente el proceso de envejecimiento de los humanos. Al reparar células y tejidos dañados de diferentes órganos, el ser humano puede conseguir la prolongación de su vida, primero hablar en cientos de años y luego en miles. Sería por la participación extraordinaria de la inteligencia artificial y las tecnologías superiores.
Amplío el panorama de observación para plantear nuestro pensamiento. Para ello usamos conceptos de epistemología, que incluye la corriente filosófica del sistemismo gnoseológico. Primero, precisamos que el cerebro humano es el órgano más importante de la evolución. Es el responsable de la creación de filosofía, ciencia y tecnología. El cerebro humano está ideando una especie de “cerebro” artificial. Es un máximo desafío.
Sucede que el cerebro humano al perfeccionar la tecnología da un gran salto con la creación de la inteligencia artificial, junto con otras tecnologías superiores, que otorgan forma a lo que denominamos el “cerebro” artificial. Usuarios de ordenadores se preocupan en establecer comparación entre el cerebro humano (CH) y el “cerebro” artificial (CA); pero, los investigadores serios van más allá en este camino.
Pensamos que lo que está pasando de manera expectante sucede en tres pasos. Paso A, presencia del cerebro humano frente al “cerebro” artificial; paso B, acercamiento de ambos cerebros, reconociendo las características de cada uno; paso C, zona de interfase o superposición entre los dos cerebros. Debo reiterar que el “cerebro” artificial está compuesto por la inteligencia artificial más la tecnología superior. así: CA = IA + TS.
Con el avance vertiginoso de la investigación tecnológica notamos procesos que se dan en el paso B, en este acercamiento entre el cerebro natural con el artificial. Continuará el empeño especial para alcanzar la superposición entre ambos cerebros (interfase), cuyo resultado sería tener un objeto con una propiedad emergente que es la megainteligencia. Se habría alcanzado la singularidad tecnológica, ubicada en la cúspide de la creación humana, con el propósito de vencer a las enfermedades y el envejecimiento, alcanzando la prolongación de la vida.