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Opinión

Contrastes y daños en el planeta, por Moisés Barrantes

“En este tiempo de contrastes y agresiones ambientales, se informa que Rusia ha descubierto en la Antártida la mayor reserva de petróleo del mundo”.

larepublica.pe
Moisés Barrantes

Vivimos en un planeta donde existe un grupo de países desarrollados y ricos y otro sector de países atrasados y pobres. Es un planeta de contrastes, desigualdad y contaminación, donde aparecen bloques hegemónicos.

Es tiempo de inventariar las cosas que existen. Poner a la luz las cosas buenas, malas y feas creadas por el ser humano.

Miremos estas cosas: diversas formas del pensamiento, aportes del cerebro (pensamiento religioso, filosófico y científico-tecnológico), recursos naturales físicos y químicos, cantidad y la calidad de flora y fauna. También hacer inventario de las cosas malas. Cuántas armas destructivas, riqueza mal habida,sustancias contaminantes, etc., que causan mucho daño a la vida.

Veamos el tema del agua dulce disponible en el planeta. El agua es fundamental para la vida de humanos, animales y plantas. Por el uso y abuso en su consumo, se está agotando. En el inventario aparecen los países con mayores reservas de agua dulce: Brasil, Rusia, Canadá, Estados Unidos, China, Colombia, Indonesia, Perú, India. En América del Sur, los países con mayor reserva de agua subterránea son Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.

El uso del agua dulce obliga a tomar medidas preventivas y solidarias.

El caso peruano compromete a todos, porque si bien en cifras tenemos agua en la Amazonía, hay dificultad para distribuirla en la sierra y costa, donde el agua escasea.

En este tiempo de contrastes y agresiones ambientales, se informa que Rusia ha descubierto en la Antártida la mayor reserva de petróleo del mundo. Sucede que la Tierra y la humanidad están viviendo una etapa con grandes cambios –algunos no buenos– no tomados con la seriedad debida.

Mundo globalizado, hiperconectado, interdependiente. Así se le denomina a la etapa que vivimos. Falta expresar los daños que sufre el planeta y cómo están los seres vivos. Hay que proteger la Tierra, utilizando lo que tenemos.

La ONU, técnica y políticamente reorganizada, podría encargarse de dirigir un Gobierno supranacional. Todos los países (o la mayoría) acatarían las directivas de este Gobierno, salvando a la humanidad y al planeta antes de que se parta en dos.