Arequipa. En medio de la actual pandemia, el camposanto Parque de la Esperanza atiende cuatro veces más servicios. Debido a esta situación, realizó una serie de cambios que apuntan a la transformación digital.
La crisis sanitaria generada por el coronavirus afectó no solo el sistema de salud de la región Arequipa, sino también al sector funerario, que vio un gran aumento en la demanda por espacios y nichos. Muchos cementerios de la región incluso colapsaron.
“Antes de la pandemia, atendíamos mensualmente 90 servicios en promedio. Apenas poco más de un mes y medio después del inicio de la primera ola, tuvimos que atender más de 400 servicios de sepultura. En esta segunda ola, en el mes de mayo, atendimos 230 servicios y calculamos que en junio tendremos todavía más”, dijo Alfredo Lezama, representante de Parque de la Esperanza.
Actualmente, este camposanto es el único de Arequipa que brinda al mismo tiempo los servicios de entierro y cremación. Para ello, cuenta con un moderno crematorio en el sur del Perú. Apenas se emitieron los protocolos del sector, la institución capacitó a todo su personal acerca de las medidas sanitarias adecuadas para conseguir un alto grado de profesionalismo y eficacia, priorizando la salud de los trabajadores y deudos.
Otras de las medidas que le permitieron al camposanto seguir brindando su servicio a los deudos de las víctimas de la COVID-19 ha sido acercarlos a sus seres queridos que han partido, incluso si las visitas físicas son imposibles debido a la coyuntura. Por ello, ofrecen como alternativa las visitas virtuales y eventos como misas y homenajes a través de su cuenta oficial en Facebook Parque de la Esperanza.
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