Por: Charlotte Plantive. Con Información de EFE y NYT.
Los demócratas del partido del presidente estadounidense Joe Biden celebraron ayer mantener el control del Senado en las elecciones de medio mandato, un resultado que sacude a sus rivales republicanos mientras Donald Trump se prepara posiblemente para una nueva postulación presidencial en 2024.
“Es un motivo de celebración”, dijo Nancy Pelosi, la líder de los demócratas en la Cámara de Representantes, toda sonrisas en CNN, luego de que el sábado se anunciara la reelección de la senadora Catherine Cortez Masto en el estado de Nevada.
“Quién hubiera pensado hace dos meses que esa ola roja se convertiría en una gotita muy pequeña”, bromeó Pelosi en alusión al color del Partido Republicano. Ante la alta inflación y la impopularidad de Biden, dirigentes de peso republicanos habían pronosticado incluso un “tsunami” rojo durante la votación del 8 de noviembre.
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Este resultado ilumina el horizonte de Biden. “Me siento bien y con expectativa de cara a los próximos dos años”, dijo el presidente desde Phnom Penh, Camboya, donde se reunió con líderes asiáticos antes de viajar a la cumbre del G20 en Bali.
En opinión de algunos analistas las elecciones intermedias fueron muy buenas para el presidente Biden y los demócratas, que ya se proyectan a las presidenciales del 2024, pero al parecer hay dudas acerca de ir a la reelección del actual mandatario estadounidense y ya empiezan a aparecer nuevos rostros en el camino demócrata.
Demócrata. Reelección de Cortez Masto allanó triunfo. Foto: difusión
Trump, omnipresente en la campaña, buscaba incluso surfear la ola republicana para anunciar una nueva candidatura a la Casa Blanca. Todavía se espera un “gran anuncio” este martes, pero su estado de ánimo ha cambiado.
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Ayer, Trump culpó de la derrota a Mitch McConnell, el líder de los republicanos en el Senado, un fuerte aliado suyo durante su mandato pero de quien se ha distanciado desde el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 por parte de trumpistas.
“Metió la pata en las elecciones y todos lo desprecian”, dijo el mandatario republicano en su red Truth Social, criticando a McConnell por no invertir suficiente dinero en la campaña de Blake Masters, el candidato apoyado por Trump en Arizona.
La derrota de Masters, así como otra de las fichas de Trump en Nevada, permite a los demócratas quedarse con 50 escaños de los 100 del Senado, y por tanto les da el dominio de la Cámara alta ya que la vicepresidenta Kamala Harris tiene el voto de desempate.
Entre los republicanos moderados, el gobernador de Maryland, Larry Hogan, presentado como posible rival de Trump en 2024, atribuye este fiasco al multimillonario republicano. “Esta es la tercera elección consecutiva que Donald Trump nos hace perder”, aseveró el domingo en CNN.
En opinión del ensayista Frank Bruni del New York Times, después de dos años de Biden, los votantes les dieron a los demócratas un suave tirón de orejas. Eso es un milagro y bien puede amortiguar las conversaciones sobre si él debería postularse para un segundo mandato.
El ruido no desaparecerá por completo. Está el asunto de la edad de Biden, y su energía. Ya era el presidente de mayor edad en la historia de EE. UU. cuando asumió el cargo a los 78 años. Tendría 82 años en las elecciones de 2024. Se nota. No proyecta nada parecido a la efervescencia que alguna vez tuvo. “Esta es la tercera elección consecutiva que Donald Trump nos hace perder”, aseveró Hogan en CNN.