No es fácil adiministrar el dinero ya que este se puede escapar como el agua entre los dedos antes de que nos demos cuenta. Más de alguna vez te habrás preguntado ¿en qué me lo gasté? ¿Y cómo es posible que no me quede casi nada?
Bryan Kuderna, planificador financiero y fundador de la firma estadounidense Kuderna Financial Team, se ha dedicado a investigar cómo los millennials pueden mejorar su manejo del dinero y construir un futuro económico más seguro. Respecto a aquellos que no tienen el dinero para ahorrar, el especialista concluye que la alternativa es generar más ingresos o reducir los gastos.
A continuación, te presentamos los cinco mayores errores cometidos por los jóvenes con su dinero, según este experto de las finanzas.
No tener un fondo de emergencia
No planificar tus finanzas suele ser un asunto de pereza o de esperar a que llegue el “momento perfecto”, dice Kuderna. En ese sentido, algo esencial es ahorrar con el objetivo de tener un fondo de emergencia que pueda sostenerte por al menos seis meses y así enfrentar imprevistos.
Acumular deuda en la tarjeta de crédito
Las tarjetas son la mayor arma de doble filo. Te pueden ayudar en muchas ocasiones, explica el consultor, pero con intereses cercanos al 20% (en el caso de Estados Unidos), es necesario pagarlas mensualmente. El pago de intereses y la acumulación de deudas pueden terminar adueñándose de tu presupuesto.
Dejar que la deuda educacional siga creciendo
Hay distintos tipos de deuda. La deuda por crédito estudiantil es una deuda “insegura” porque su pago depende únicamente de tus ingresos. En este caso, dice Kuderna, hay que mirar todas las opciones disponibles para refinanciar dicha deuda con la menor tasa de interés posible y a un número de años que te permita pagar la cuota mensual.
Comprar casa y quedarse sin dinero
En sus talleres de alfabetización financiera, Kuderna suele preguntarle a la audiencia: ¿cuál es el primer objetivo que se plantean al salir de la universidad?. “La respuesta más popular es comprarme una casa”, le dice a la BBC.
Pero cuando les pregunta sobre ahorrar, no tienen una respuesta, esa falta de jerarquización, desde lo más importante a lo menos importante, “puede hacer que los jóvenes terminen viviendo en su casa, pero sin muebles”, apunta el experto.
Compararse con los demás
Dejar de lado la vanidad es una buena manera de iniciar un plan financiero que permita tomar decisiones sensatas para manejar el dinero, comenta Kuderna. Las decisiones de gasto más irracionales o irresponsables están muchas veces influidas por el deseo de mantener un cierto estándar de vida.
Básicamente, el intento de mantener un nivel de gasto que no sea inferior al de otras personas que conocemos. Eso es algo que no ayuda en nada, porque finalmente todos tenemos situaciones económicas distintas y no vale la pena compararse o tratar de seguir el nivel de gastos del vecino.
FUENTE: BBC