Enviada especial a Tokio.
Cuando ganó la medalla de bronce en los Juegos Panamericanos Lima 2019, las puertas de la fama se abrieron de par en par para el boxeador José María Lúcar. Su exposición mediática fue notable tras su brillante participación en el cuadrilátero, pero jamás imaginó que también tendría que pelear contra la indiferencia y la falta de apoyo.
El púgil nacional clasificó a Tokio 2020 gracias a su buena ubicación en el ranking mundial. Llegó a los Juegos Olímpicos lleno de sueños al igual que el resto de la delegación peruana y tuvo que despedirse rápidamente, pues fue eliminado en su debut por el alemán Riad Abdujabbar en la categoría pesos pesados (81-91 kg).
La República conversó en exclusiva con José María Lúcar luego de competir en el Arena Kokugikan, sede espiritual del sumo japonés acondicionada para la ocasión, donde nuestro compatriota hizo una profunda reflexión sobre las carencias que noquean a este deporte.
“El boxeo tiene problemas de presupuesto, y la Federación, yo (estuve) entrenando en las calles prácticamente. Se pudo viajar quince días a Italia. No hubo competencias previas”, señaló de entrada con gotas de sudor en el rostro y los ojos rojos de impotencia.
“Pero no son excusas, son cosas que se pueden mejorar. Creo que todo esto debe ser para sumar. Toda crítica debe ser constructiva, mas no destructiva. De todas maneras, estoy agradecido por el apoyo que se me viene dando, pero creo que se puede hacer un poco más para obtener mejores resultados”, agregó.
José María es vecino de Miraflores. Parte de su preparación para los Juegos Olímpicos la realizó en el malecón. En sus tiempos libres trabajaba como ayudante de cocina en el restaurante familiar que funciona en dicho distrito. Para salir adelante tiene que pelear contra todo y contra todos.
“Pediría que se resuelvan los problemas en cuanto al boxeo peruano, porque hay ganas, hay disposición, hay todo. Hay talento”, enfatizó y aprovechó la oportunidad para dedicar un mensaje a su papá, quien estuvo grave de salud. “Quise darte la victoria, pero no se pudo. Te prometo que lo voy a lograr”.
Una acción judicial contra la Federación Deportiva Peruana de Boxeo (FDPB) evitó que el Instituto Peruano del Deporte (IPD) pueda brindar a los deportistas las subvenciones económicas que necesitan.
A principios de año, el presidente del IPD, Gustavo San Martín, reveló que el boxeo tiene dos deudas judiciales por gastos que no han sido rendidos en su momento. Uno es por 99.000 soles y otro por casi 240.000, “por esa razón la ley nos impide darle dinero (subvención)”, aclaró. El IPD aseguró que los boxeadores no han sido abandonados.
“Siguen recibiendo su programa de apoyo al deportista, el IPD ha contratado a los entrenadores, fisioterapeutas, a los médicos, y siguen recibiendo recursos del Estado”, declaró San Martín en enero.
Alzó la voz. El presidente del Comité Olímpico Peruano, Pedro del Rosario, pidió al presidente Castillo que no se olvide del deporte. “Con el Gobierno actual hemos trabajado bien, tenemos que seguir apoyando a esta generación”.
Suscríbete aquí al boletín Deportes La República y recibe de lunes a viernes en tu correo electrónico todas las novedades del deporte nacional e internacional.