El 17 de marzo de 2013 es una fecha que no se borrará nunca de la mente de Álvaro Ampuero. El exjugador de Universitario de Deportes debutaba con el Parma de Italia en el Estadio Olímpico de Roma, nada más y nada menos, que ante el AS Roma de Francesco Totti, el eterno capitán italiano que jugó toda su vida en ‘La Loba’.
El defensa peruano había fichado por el Parma a mediados de 2012 con un contrato de cinco años cuando jugaba en la ‘U’, y a inicios del siguiente año tenía que sumarse a su nuevo club. Durante tres meses, el entrenador italiano Roberto Donadoni le hizo un régimen especial de entrenamiento para que logre alcanzar el nivel físico necesario para la competición europea.
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Comenzó a salir en lista de convocados en varios partidos, como contra el Genoa, AC Milan, Catania, Sampdoria y Torino, pero no sumó minutos. Hasta que llegó el día.
Fecha 29 de la Serie A. Partido contra el AS Roma de Simone Perrotta, Francesco Totti y Daniele De Rossi, campeones del mundo con Italia en 2006, entre otras figuras, que estaba peleando la punta del campeonato de la mano de Andrea Andreazoli. Y en el Estadio Olímpico de Roma, que fue la sede principal de los Juegos Olímpicos de 1960 y la final de la Copa del mundo en 1990 entre Argentina y Alemania.
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Parma llegaba en su peor momento con un triunfo en nueve partidos. El técnico decidió hacer algunos cambios en el once titular y Ampuero llegó a su mente. “La noche anterior de partido, Donadoni que hablaba español, entró a mi habitación y me dijo: ‘Álvaro mañana serás titular y vas a jugar de volante por interno’”, recuerda el actual jugador del Zira de Azerbaiyán en conversación con La República.
El trabajo que le pidió Donadoni al futbolista, que salió al campo del Olímpico de Roma con el dorsal número ‘2’, era tener una gran posesión del balón en campo contrario y cortar el juego del rival, en una línea de tres volantes acompañado del italiano Marco Parolo y el chileno Jaime Valdés.
“El partido fue difícil, la Roma tenía un equipazo. Eran los segundos o terceros del campeonato. No tuve una marca especial con algún jugador, pero por la posición que me tocó, a cada rato choqué con el argentino Erik Lamela y con Francesco Totti”. Precisamente, los jugadores que anotaron los dos goles del partido a los 7’ y 70’ minutos, respectivamente.
En aquel partido, Álvaro Ampuero jugó 60 minutos y fue reemplazado por el francés Jonathan Biabiany. “Sentía que había jugado dos partidos, los jugadores de la Roma volaban, no paraban de correr. Cumplí la labor de tener la pelota las veces que podíamos. Fue un partido parejo pero perdimos 2-0. El Olímpico de Roma es espectacular. La hinchada de ellos. Son esos momentos donde te llenas de adrenalina. Te motivas por todos lados y te olvidas de todo”.
Pero, ¿qué hay detrás de esa foto de Ampuero marcando a Totti? Hay un sueño. El sueño de Álvaro Ampuero de jugar en Italia y enfrentar a su ídolo de la infancia: Francesco Totti. Ese día, todos los caminos conducían a Roma.
“Fue un sueño hecho realidad, un año y medio antes estaba jugando en la reserva de la 'U'. No conversé con Totti en el campo, no me dio la camiseta y tampoco intenté pedírsela porque fui cambiado. A él le piden la camiseta todos al final de cada partido. En el banco pensé: ‘ya cumplí el sueño de jugar aquí, de enfrentarlo, lo vi de cerca, y ya está’. La camiseta es un extra. Mi novia me regaló unos cuadros de varias fotos hace un tiempo y en una de esas estaba la de Totti. La tengo guardado en Perú”, concluyó.