James Leininger tiene actualmente 24 años y desde la edad de los 2 años aseguraba que en su vida anterior fue un piloto que peleó en la Segunda Guerra Mundial. Sus constantes sueños hicieron que cada vez recordara más detalles de cómo fue su muerte y de que más personas creyeran en la reencarnación.
El caso se volvió viral a fines de los años 90 y fue objeto de estudio para muchos escépticos, quienes quedaban sorprendidos con las increíbles coincidencias que se iban documentando entre lo que James narraba y los hechos históricos.
PUEDES VER: La triste historia de Peter, el delfín que se 'enamoró' de su entrenadora y murió por 'amor'
Todo inició cuando, a la edad de 2 años, el pequeño James y su padre, Bruce Leininger, visitaron el museo de aviación en Addison, Texas, en donde mostró un gran interés por una exposición dedicada a la Segunda Guerra Mundial. Fue así que lo llevaron una segunda vez, lo que ocasionó que el menor empezara a repetir: "Choque de avión en llamas", y a estrellar sus aviones de juguete contra los muebles.
Todo parecía un juego normal hasta que empezó a tener pesadillas diarias en las que se despertaba gritando: "¡Avión se estrella en llamas! ¡El hombrecito no puede salir!".
James dibujó lo que veía en sus sueños. Foto: Lanación
Ante lo repetitivo de sus sueños, sus padres le pidieron al menor a que les cuente más sobre sus pesadillas. James explicó que eran recuerdos de su vida pasada, en la que veía cómo su avión era derribado por los japoneses. Lo asombroso de su relato fue que especificó que su aeronave era un Corsair y que había desembarcado de un barco llamado Natoma.
Para sorpresa de su padre, quien decidió investigar estos nombres, descubrió que sí existió un portaaviones llamado USS Natoma Bay, que se encontraba estacionado en el Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial.
Tras posteriores conversaciones con el menor, reveló un nuevo nombre: Jack Larsen, quien habría sido su piloto de combate que estuvo en esa embarcación y que vivía en Arkansas. El padre de James no dudó en visitar a Jack y este le reveló que el único piloto de la tripulación declarado desaparecido fue un joven de 21 años llamado James M. Huston Jr.
James M. Huston Jr. habría reencarnado en el pequeño James Leininger. Foto: lanación
Las coincidencias no terminaron ahi. El pequeño también solía jugar con tres muñecos a los que llamó León, Walter y Billie. Los padres de James decidieron investigar y descubrieron que estos coincidían con tres nombres reales del escuadrón VC-81, el mismo al que perteneció a James Huston y que también murieron en batalla. Cuando le preguntaron al niño por qué esos nombre, él dijo: "Porque ellos me saludaron en el cielo después de estrellarme".