Sales a la calle ya sea para ir a trabajar o estudiar y te das cuenta de que está lloviendo o que todas las calles se encuentran húmedas. Lo primero que haces es caminar despacio para evitar caerte por lo resbaladizo que pueden resultar las suelas de tus zapatillas o zapatos.
Tranquilo, existen trucos caseros que te ayudarán a que puedas caminar con más calma sin el temor a que puedas sufrir un accidente.
¿Cómo evitar que mis zapatillas resbalen en la lluvia?
A continuación, te brindaremos cuatro trucos brindados por la youtuber AZAFRANAL43, quien es una zapatera dedicada a subir contenido para el cuidado del calzado.
- Lijar la suela: este es uno de los métodos más eficaces y solo necesitarás un papel de lija de grano fino. Una vez que consigas la lija, deberás frotarla en la suela despacio y con movimientos circulares hasta que notes una ligera suavidad. La zona delantera de la planta debe ser prioridad para evitar caídas o resbalones.
- Frotar con una papa: sí, es un gran aliado para hacer que tus zapatos no resbalen. Cuando partes una papa, sale un líquido blanco. Esta sustancia se llama almidón. Para el siguiente truco, deberás partir una papa por la mitad y presionarla hasta que salga este líquido. Seguidamente, frota el tubérculo por la suela de tu calzado. Ahora, solo te queda esperar que seque y listo. Podrás andar por las calles húmedas sin miedo a resbalarte.
- Laca para el cabello: lo único que deberás hacer es echar la laca a la suela y esperar a que se seque. Cabe resaltar que cumple la misma función que un aerosol antideslizante, pero este dura menos tiempo.
- Lima de uñas: si estás con prisa, utiliza esta herramienta. Al limar la suela, hará que se forme porosidad o finas ranuras que impedirán que el zapato resbale.