Históricamente, se conoce que el cuerpo humano cuenta con 78 órganos. Sin embargo, estudios recientes sugieren que debe considerarse uno nuevo, debido a que cumple funciones específicas y debe tratarse de manera aislada durante intervenciones médicas.
A través de un informe, la Asociación Europea de Cirugía Cardiotorácica (EACTS) se refiere a la aorta como un órgano del cuerpo humano y no solo como un vaso sanguíneo encargado de transportar sangre. La investigación, donde se detalla varios aspectos de la arteria, podría cambiar la perspectiva con la que se ve el tratamiento de los problemas en la aorta, considerándola una unidad conjunta funcional del cuerpo.
La búsqueda de un lenguaje común para abordar las diversas disciplinas de la medicina aórtica es una de las razones por las que se requiere considerar a la aorta como un órgano. Entre las especialidades que abordan enfermedades relacionadas están la cardiología, la radiología y las cirugías cardiovasculares, entre otras.
Asimismo, se tiene en cuenta las complejas funciones de las que se encarga. Un informe de la Universidad de Friburgo en Alemania destaca su rol en la regulación de la presión arterial y la velocidad del flujo sanguíneo. Además, interviene en la producción de determinadas hormonas en nuestro sistema endocrino.
La aorta regula la presión arterial y controla el flujo sanguíneo. Foto: Agencia DIB
Desde EACTS se pone como ejemplo a los pacientes con enfermedades como el aneurisma, quienes requieren intervenciones aórticas a lo largo del tiempo. Por lo tanto, desarrollar un método que enfoque exclusivamente en la aorta desde la comunidad científica agilizaría los procesos en cuanto a la intervención médica.
Un aneurisma es un ensanchamiento anormal de las paredes de una arteria. Esta enfermedad responde a un síndrome aórtico. Existen dos tipos, el aneurisma aórtico torácico (ocurre en la aorta que pasa por el pecho) y el aneurisma abdominal. El riesgo de esta afección radica en el crecimiento acelerado de la arteria, lo que aumenta la posibilidad de provocar un sangrado peligroso e incluso la muerte.
Un aneurisma es el ensanchamiento anormal de las paredes de una arteria. Foto: EsSalud
Por ello, la Universidad de Friburgo señala que se necesita de un rápido tratamiento médico para prevenir complicaciones en la aorta. Tener una visión holística de este síndrome ayudará en la investigación de procedimientos seguros y con mayor porcentaje de eficacia a la hora de intervenir quirúrgicamente a un paciente diagnosticado con esta enfermedad.
Se han registrado muchos casos de pacientes con aneurisma que, a pesar de haberse sometido a intervenciones quirúrgicas, siguieron experimentando dificultades en cuanto a los síntomas de este síndrome. Uno de los objetivos de convertir la aorta en un órgano independiente es profundizar en la investigación detallada que, a largo plazo, evite las complicaciones postoperatorias.