Cargando...
Ciencia

Los viajes interestelares serían posibles aun sin naves espaciales, asegura astrónoma

Sea para huir de nuestro mundo o colonizar otras galaxias, en un futuro podríamos emplear esta técnica como medio de transporte.

larepublica.pe
La astrónoma asegura que civilizaciones extraterrestres más avanzadas que la nuestras podrían estar conquistando galaxias dando saltos entre planetas rebeldes. Foto: NASA

Los viajes interestelares aún se encuentran lejos del alcance del ser humano. Llegar con la tecnología actual a Alpha Centauri, el vecindario interestelar más cercano al Sol, ubicado a 4,36 años luz, nos tomaría cientos de millones de años, más del tiempo de la evolución de nuestra especie.

Sin embargo, Irina Romanovskaya, profesora de física y astronomía de Houston Community College (Estados Unidos), sostiene que civilizaciones extraterrestres más avanzadas —en caso existiesen— podrían lograrlo sin utilizar naves espaciales.

Sus medios de transportes, en cambio, podrían ser planetas errantes también llamados planetas rebeldes (o rogue planets, en inglés). Dichos cuerpos les servirían como un “bote salvavidas” en caso su mundo esté por ser destruido por su estrella o, en todo caso, como una forma de expandirse por la galaxia y colonizarla.

Estos planetas ‘vagabundos’ son objetos interestelares que no pertenecen a ningún sistema de planetas. Ya sea porque fueron expulsados de este o porque nunca estuvieron relacionados gravitacionalmente a ninguna estrella.

En 2021, un equipo internacional de astrónomos detectó entre 70 y 170 planetas errantes en la región ubicada dentro de las constelaciones de Escorpio y Ofiuco. En tanto, otro estudio de 2020 sugiere que solo en la Vía Láctea podrían existir hasta 50 mil de ellos.

Fotografía de 115 potenciales planetas errantes entre la constelación de Escorpio y Ofiuco. Foto: ESO / N. Risinger (skysurvey.org).

Los planetas errantes, una vía de escape

En su investigación, publicada en International Journal of Astrobiology, Romanovskaya sugiere que las civilizaciones extraterrestres podrían aprovechar los rogue planets de cuatro modos.

Primero, los seres superiores podrían aprovechar de aterrizar en un planeta rebelde cuando este se aproxime lo suficiente al mundo donde viven.

Según la científica dicho escenario sí es posible ya que el sistema solar vivió algo similar hace 70.000 años, cuando la estrella binaria W0720 (estrella de Scholz) atravesó la Nube de Oort, una cáscara esférica de cuerpos helados que envuelve a nuestro sistema estelar.

En un segundo caso hipotético, la civilización extraterrestre puede disponer de tecnología capaz de acercar a un planeta errante a una órbita cercana. Luego, con tiempo suficiente, podrían adaptar dicho mundo a sus necesidades, como crear una atmósfera, construir refugios subterráneos, etc.

El tercer escenario implica que la civilización extraterrestre pronostique el paso de un planeta errante con un recorrido tan excéntrico, capaz de alejarlo muy lejos de su lugar de origen. Romanovskaya pone a nuestro planeta enano Sedna como ejemplo, cuya órbita lo aproxima a nuestro Sol a 76 UA y luego lo distancia a a 937 UA en 11.000 años. Una unidad astronómica (UA) equivale a longitud entre la Tierra y el Sol.

En la fila superior, diagrama del sistema solar interior (izquierda) y el sistema solar exterior (derecha). En la fila inferior, la órbita del planeta enano Sedna (derecha) y el borde de la nube de Oort (izquierda). Foto: NASA

De acuerdo con Romanovskaya “las civilizaciones capaces de hacerlo serían civilizaciones avanzadas que ya tienen sus sistemas planetarios explorados a distancias de al menos 60 UA de sus estrellas anfitrionas”.

La cuarta y última posibilidad sería que aprovechen el momento cuando su estrella abandona su fase de secuencia principal, se expande y por el tirón gravitatorio expulsa a los objetos cercanos. Si se pudiera precisar qué mundos serían arrojados como planetas errantes, la civilización podría escapar en ella.

Sin embargo, a autora explica que en todos los escenarios, los planetas errantes no servirían como un medio permanente de escape. Esto debido a la “disminución de la producción de calor en sus interior”, por lo que “eventualmente no logran sostener océanos de agua líquida (si es que tales océanos existen)”.

Más allá de nuestro sistema estelar, conocido como el sistema solar, existen otros miles que desconocemos. Foto: NASA.