En el momento más esperado por la ausencia del brasileño Vinicius Junior, el delantero estrella del Real Madrid, el francés Kylian Mbappé, vivió una noche de pesadilla el miércoles en la derrota 2-0 en Liverpool, tras fallar un penal y una actuación preocupante, tanto deportiva como mentalmente.
Todo esto se produce después de que el pasado domingo hubiera visto un pequeño claro en el cielo de Leganés, una ciudad pequeña de la Comunidad de Madrid, donde el atacante galo volvió a encontrar la red, tras un pase de Vinicius.
En medio de una espesa niebla, Mbappé abandonó el mítico campo de Anfield, en Liverpool, al final de un partido en el que fue incapaz de marcar la diferencia y volver a meter a su equipo en el partido.
"Sólo los que asumen sus responsabilidades pueden fracasar", intentó explicar el técnico madridista Carlo Ancelotti, sin solución para relanzar a su equipo, vigente campeón de Europa y que se halla ahora en la posición 24ª, la última plaza que da acceso al 'playoff' de repesca para los octavos de final.
"Es un jugador maravilloso, pero la presión sobre él por lo bueno que es enorme. El penalti no es la razón por la que perdimos el partido. Ellos jugaron mejor que nosotros. Sé que producirá muchos más momentos que serán enormes para este club", dijo también su compañero, el inglés Jude Bellingham.
Sin embargo, es la foto de su caída, con la cabeza contra el césped, tras recibir un golpe en el hombro del coloso neerlandés Virgil Van Dijk, la que se utiliza en todas partes en las redes sociales y en la prensa para ilustrar su "hundimiento", con sólo un tiro a puerta, en el minuto 88, 15 balones perdidos y sólo seis duelos ganados de trece.
Impreciso y amordazado por Conor Bradley, de 21 años, en su carril izquierdo, Mbappé es señalado por la prensa española, sin piedad tras este nuevo encuentro perdido.
"El Madrid sigue ofreciendo muy poco en los partidos importantes esta temporada. Y el reflejo de la situación es la cara de Kylian Mbappé, un futbolista que es una sombra de lo que se presupone que es", explica el diario Marca, que subraya que no le salen las cosas como querría y que "la crisis de confianza que sufre le devora hasta el punto de convertirse en un jugador irreconocible".
El periódico deportivo lamenta que el delantero no haya aprovechado la gran oportunidad que le ha brindado la baja de Vinicius. "Sin Vinicius, en la noche en la que más se le esperaba, firmó un partido calamitoso", arremetió.
"El francés vuelve a fallar en un día grande y, sin Vinicius, pierde la coartada de la posición que ocupa en el campo", escribe el AS, que le dio una nota de uno sobre diez.
"Es un momento complicado para él, pero tiene el apoyo de todos. Debemos mirar adelante. Hay una medicina, que es ser paciente. La idea debe ser jugar sencillo. Calma. Esto es transitorio. Es un jugador extraordinario y los goles llegarán", afirmó Ancelotti.
Un discurso cada vez menos sonoro en la capital española, donde empieza a circular el nombre del argentino Santiago Solari, actual director de fútbol del Real Madrid, presente en la delegación a Leganés junto a su presidente Florentino Pérez, para sustituir al entrenador italiano temporalmente.
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