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PlayStation lanzará una consola portátil que requiere que ya tengas PS5: ¿oportunidad perdida?

La consola llegará en 2023 y permitirá "jugar a tu PS5 de forma remota a través de wi-fi". A diferencia de su estrategia en PC, este dispositivo estará cerrado a su ecosistema ya existente.

A diferencia de su estrategia en PC, este dispositivo estará cerrado a su ecosistema ya existente, alienando a potenciales usuarios acostumbrados a otras plataformas. Foto: Sony
A diferencia de su estrategia en PC, este dispositivo estará cerrado a su ecosistema ya existente, alienando a potenciales usuarios acostumbrados a otras plataformas. Foto: Sony

La movilidad en el mundo de los videojuegos está en auge. Dispositivos como la Steam Deck y la próxima ASUS ROG Ally son muestra de ello. Pero ahora es Sony quien presenta su propio concepto portátil. Bajo el nombre provisional de 'Project Q', la nueva propuesta fue confirmada después de semanas de conjeturas, por el propio Jim Ryan, durante el último PlayStation Showcase 2023. El equipo, en palabras del presidente, permitirá "jugar a los títulos de PS5 en cualquier lugar a través de Remote Play y una conexión wi-fi estable". ¿Pero se trata de una oportunidad desaprovechada o de un paso adelante en la experiencia de juego móvil?

La noticia ha generado un gran revuelo entre los jugadores, quienes buscan llevar consigo la potencia de la PlayStation 5 a todas partes. La pantalla FHD de 8 pulgadas y los botones y funciones del controlador inalámbrico DualSense aseguran una experiencia de juego completa, similar a la que se experimenta en la consola de sobremesa. Sin embargo, todavía quedan muchas incógnitas por resolver.

Según informes de The Verge, Sony no ha revelado detalles sobre el sistema operativo ni el firmware que impulsarán este dispositivo. Además, no está claro si solo se podrá jugar en streaming con la PS5 encendida o si también se podrán ejecutar directamente los juegos comprados y compatibles con Remote Play en la consola portátil. Estas incógnitas dejan a los jugadores con la esperanza de obtener respuestas en un futuro cercano.

A pesar de la incertidumbre en torno al software, se sabe que la consola portátil contará con una pantalla LCD IPS de 8 pulgadas, resolución FHD de 1080p y una tasa de refresco de 60 Hz. La conectividad wi-fi de doble banda garantiza una conexión estable para disfrutar de los juegos en streaming sin interrupciones. Además, la retroalimentación háptica DualSense y los activadores adaptativos proporcionarán una experiencia de juego inmersiva.

La fecha de lanzamiento y el precio de este dispositivo aún no se han revelado, lo que genera aún más expectación entre los aficionados a los videojuegos. Lo único que sabemos es que llegará a finales de 2023, lo que nos hace sospechar más sobre qué tipo de hardware podría traer y su relación con la plataforma ya existente: PS5.

¿Por qué es una oportunidad perdida?

En definitiva, la decisión de Sony de volver a atacar el mercado móvil es interesante. La marca japonesa se esfumó de dicho nicho hace poco, cuando terminó el soporte oficial de la PS Vita, la cual nunca pudo cumplir sus expectativas comerciales. La Vita sufrió de un problema que acecha a Sony por décadas: querer imponer estándares en un mercado con suficientes opciones, en este caso, el disco UMD, que hizo eco con otros intentos no del todo exitosos como el Betamax y el Mini-disc.

Pero la decisión de Sony no parece haber salido de la nada. Como explicábamos en otra oportunidad, la tendencia del mercado portátil es fuerte hoy en día, y todo coincide con una evolución del concepto de la Nintendo Switch: el de los dispositivos híbridos.

El mercado híbrido es prácticamente el causante de que las consolas portátiles ya sean algo del pasado. Si bien la Switch combinó las propuestas de consola tradicional y portátiles en su propio ecosistema, esto era algo que en el mundo de la tecnología se veía venir (con el rápido avance de la potencia en dispositivos móviles). Las laptops eran cada vez más pequeñas y los celulares y tablets cada vez más potentes. Luego aparecieron los conceptos 2 en 1 y el resto es historia.

Tras la Switch, pasó lo mismo con el mercado de juegos móviles, hasta que apareció la Steam Deck que resultó ser un éxito. El juego en la nube o portátil con hardware nativo ya no es el experimento de antes, ahora está bien establecido con decenas de marcas desarrollando mejores conceptos.

Aun así, la propuesta de Sony parece obviar todo lo que esta nueva serie de dispositivos conlleva y ha desarrollado a Project Q como una simple extensión de la base de usuarios ya existente de PlayStation. Si necesitamos una PS5 para utilizar la Project Q, entonces no hay flujo de entrada para usuarios nuevos, sobre todo aquellos que también pensarán en si comprar una Steam Deck, una Aya Neo, una ROG Ally o simplemente suscribirse a Xbox Game Pass y disfrutar de un mayor catálogo desde cualquier dispositivo.