Putin desplegará el misil hipersónico Oréshnik en Bielorrusia tras acuerdo de seguridad ante la OTAN
Con este despliegue, Rusia y Bielorrusia refuerzan su cooperación militar y envían un mensaje claro a la OTAN sobre su compromiso con la seguridad territorial en la región.
- Nuevo ataque de Estados Unidos deja cinco muertos tras bombardear dos presuntas narcolanchas: escalada suma 104 víctimas
- Maduro advirtió al secretario general de la ONU que "amenazas" de Trump podrían afectar la paz regional
El presidente ruso, Vladímir Putin, anunció el despliegue de misiles balísticos hipersónicos Oréshnik en Bielorrusia, en respuesta a la creciente amenaza de la OTAN. Esta decisión se enmarca en un contexto de tensiones geopolíticas en Europa, especialmente en relación con Ucrania.
Durante una reunión en Minsk, Putin destacó que estos sistemas se integrarán en las Fuerzas Estratégicas de Rusia, mientras que el presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, solicitó públicamente el envío de este armamento de nueva generación. La situación en la región se complica con la presencia militar de la OTAN en las fronteras bielorrusas.
TE RECOMENDAMOS
ELECCIONES Y CONTINÚA PERSECUCIÓN PARLAMENTARIA |SIN GUION CON ROSA MARÍA PALACIOS
PUEDES VER: Putin advierte a Trump sobre su seguridad en EE. UU. a meses de sus atentados: "Él todavía corre peligro"
Putin subrayó que la alta precisión de los misiles Oréshnik los convierte en una herramienta estratégica, capaz de alcanzar rápidamente las capitales europeas. Este despliegue se produce en un contexto de creciente cooperación militar entre Rusia y Bielorrusia, que incluye un nuevo acuerdo de garantías de seguridad.
El Oréshnik: un nuevo actor en el escenario militar
El Oréshnik, también conocido como Avellano, fue presentado oficialmente el 21 de noviembre, cuando se utilizó para atacar una fábrica de armamento en Ucrania. Este sistema de misiles, que se encuentra en producción en serie, se considera un avance significativo en la capacidad militar de Rusia. Lukashenko, en su intervención, enfatizó la necesidad de contar con este armamento en Bielorrusia, lo que refleja la creciente preocupación por la actividad militar de la OTAN en la región.
La respuesta de Putin y el contexto geopolítico
Putin, al responder a la solicitud de Lukashenko, mencionó que el despliegue de los Oréshnik en Bielorrusia se llevará a cabo una vez que la producción esté en plena marcha, prevista para la segunda mitad de 2025. Este despliegue no solo busca fortalecer la defensa bielorrusa, sino también enviar un mensaje claro a la OTAN sobre la determinación de Rusia de proteger sus intereses en la región.
Objetivos estratégicos y la doctrina militar conjunta
El presidente ruso destacó que, aunque el control sobre el uso de los misiles estará en Moscú, la selección de objetivos en caso de un conflicto será responsabilidad de Bielorrusia. Lukashenko, por su parte, ha señalado que la amenaza de Polonia y Lituania es más preocupante que la situación en Ucrania, lo que añade una nueva dimensión a la estrategia militar de la región.
Acuerdo de garantías de seguridad entre Rusia y Bielorrusia
En el marco de este despliegue, Putin y Lukashenko firmaron un acuerdo que establece las obligaciones de ambos países en defensa de su soberanía e integridad territorial. Este acuerdo se produce en un contexto de creciente cooperación militar, que incluye un sistema conjunto de defensa antiaérea y una agrupación militar regional, lo que refuerza la posición de ambos países frente a las amenazas externas.
