Estados Unidos

La zona del "triángulo de la muerte" donde nunca debes reventar un grano, según dermatólogo de Nueva York

Reventar granos en el triángulo de peligro puede generar heridas abiertas que quedan expuestas a bacterias del ambiente o de las manos.

Según el Dr. Strom, el triángulo de la muerte comprende desde el puente de la nariz hasta las comisuras de los labios y está conectada a través del seno cavernoso. Foto: IA
Según el Dr. Strom, el triángulo de la muerte comprende desde el puente de la nariz hasta las comisuras de los labios y está conectada a través del seno cavernoso. Foto: IA

¿Sabías que explotar un grano en una zona específica del rostro puede tener consecuencias graves para la salud? El doctor Mark Strom, un dermatólogo certificado en Nueva York, advierte que esta área, conocida como el "triángulo de la muerte" o "triángulo de peligro", presenta un alto riesgo de infección que puede afectar incluso el cerebro. Según el Dr. Strom, esta zona comprende desde el puente de la nariz hasta las comisuras de los labios y está conectada a través del seno cavernoso, un vaso sanguíneo crucial que drena sangre hacia el cerebro. Reventar un grano en esta área podría provocar una infección que se propague rápidamente y poner en peligro la vida de las personas.

Zoe Devine, otra experta en cuidado de la piel, también recomienda evitar manipular lesiones profundas e inflamadas, ya que al hacerlo se corre el riesgo de propagar bacterias y agravar la condición de la piel. Dicha manipulación podría resultar en cicatrices permanentes. Los especialistas coinciden en que, ante brotes en el rostro, es fundamental optar por tratamientos específicos en lugar de ceder a la tentación de tocar o explotar los granos, especialmente en áreas delicadas como el triángulo de la muerte.

Qué es el triángulo de la muerte? - El Extremo Sur

Si accidentalmente se ha explotado un grano en el triángulo de la muerte, es fundamental mantener una estricta higiene de la herida. Foto: difusión

Riesgos de explotar granos en el triángulo de la muerte

Reventar granos en el triángulo de peligro puede generar heridas abiertas que quedan expuestas a bacterias del ambiente o de las manos. Según el Dr. Strom, estas infecciones pueden causar coágulos en las venas que, al intentar contener la infección, ejercen presión sobre el cerebro. Los síntomas incluyen desde dolor de cabeza intenso y fiebre hasta problemas neurológicos. Esto hace que la manipulación de esta zona resulte potencialmente mortal.

¿Cómo tratar el acné en el triángulo de la muerte de forma segura?

  1. Consultar a un dermatólogo: la mejor forma de tratar el acné es recibir una valoración profesional que determine el tratamiento adecuado, enfocándose en reducir el exceso de sebo y evitando la obstrucción de los folículos.
  2. Uso de productos específicos: los expertos sugieren aplicar productos con ácido glicólico y un gel antiinflamatorio para reducir la inflamación y el enrojecimiento sin riesgos de cicatrices o infecciones.
  3. Evitar tocar las lesiones: manipular un grano inflamado puede expandir las bacterias y empeorar el acné. En lugar de eso, se recomienda aplicar una compresa caliente durante 10 o 15 minutos para aliviar la inflamación.

Consejos para manipular un grano de forma segura

Si decides proceder, incluso en zonas menos peligrosas, es importante que sigas estos pasos:

  • Lávate las manos: asegúrate de limpiar bien tus manos, especialmente bajo las uñas, para evitar el riesgo de infección.
  • Usa compresas calientes: antes de intentar cualquier manipulación, coloca una compresa tibia sobre el grano durante algunos minutos. Esto ayuda a que el pus suba a la superficie, facilitando su extracción.
  • Evita las uñas: no presiones directamente con las uñas. En su lugar, usa un bastoncillo de algodón o las yemas de los dedos para una presión uniforme.

Si accidentalmente se ha explotado un grano en el triángulo de la muerte, es fundamental mantener una estricta higiene de la herida y evitar tocarla para prevenir infecciones adicionales. En caso de que aparezca enrojecimiento, dolor o inflamación que empeore con el tiempo, es crucial consultar a un profesional de la salud para evaluar la necesidad de un tratamiento antibiótico y evitar complicaciones mayores. La atención oportuna puede ser clave para prevenir secuelas graves en la piel.