Domingo

¿Por qué las futbolistas nacionales cobran menos que sus pares masculinos?

Muchos están volteando la mirada al fútbol femenino. Las jugadoras de Alianza Lima tuvieron una gran actuación en la Copa Libertadores 2021. Sin embargo, la situación de las futbolistas aún es precaria, la diferencia de sueldos con el fútbol masculino es astronómica.

La diferencia de sueldos entre el fútbol femenino y masculino es considerable.
La diferencia de sueldos entre el fútbol femenino y masculino es considerable.

Mariafe Serra

Gestora deportiva

«Si se consumiera más, tendría mayores ingresos»

¿Cuántos partidos de fútbol femenino has visto este año? ¿Viste el clásico U-Alianza femenino? ¿La final? ¿Los partidos de Alianza en la Libertadores femenina? Si la respuesta es no, por ahí empieza el porqué. Si se consumiera más, tendría mayor inversión y mayores ingresos. A las futbolistas se les paga menos porque el fútbol femenino es un mercado que, en casi todo el mundo, genera y moviliza menos dinero que el fútbol masculino. Pero es un tema que se puede corregir. Una cadena: para aumentar los sueldos se necesita aumentar la inversión; para aumentar la inversión, el consumo. Para aumentar el consumo, se debe mejorar el producto. Si bien en el Perú hay empresas que empiezan a apostar por invertir en fútbol femenino, hay otras instituciones que no. Algunos clubes no invierten en su equipo que es, finalmente, su producto: no buscan sponsores, les dan a las jugadoras infraestructuras en mal estado, no les dan estabilidad económica, no les dan nutri- cionista, preparador físico, preparador de arqueros. Si ellos mismos no invierten en su producto, ¿por qué alguien más lo haría?

Carlos Salinas

Editor Líbero

«El fútbol femenino es aún amateur»

Los sueldos de las futbolistas en Perú, y en muchos países del mundo, son inferiores al de sus pares varones porque el fútbol femeni- no es una categoría aún amateur en proceso de crecimiento en los clubes, que no tiene, por ahora, el presupuesto que maneja el balompié profesional masculino. Cuando hablamos de presupuesto, hablamos de in- gresos por concepto de venta de entradas, de derechos de televisión, sponsoría y merchandising. Como toda unidad de negocio dentro de un club, la femenina en Perú se tiene que ajustar al presupuesto con el que cuenta y, hoy en día, ese dinero no es comparable con lo que factura el fútbol de varones, aunque es importante señalar que los presupuestos del fútbol femenino en clubes como Alianza, Cristal y Vallejo van en aumento y también irán en aumento los sueldos de las futbolistas, además de la formalización de sus contratos. En gran parte de Europa y en países como Estados Unidos, Brasil y Argen- tina, el fútbol femenino ya es profesional y las futbolistas tienen contratos anuales y suel- dos acordes con la dimensión que el fútbol femenino ha alcanzado en esos lugares.

Luccina Aparicio

Periodista ESPN

«Los equipos recién se formaron el 2019»

Tras la última hazaña de Alianza Lima en la Libertadores, ha surgido el interés del porqué el salario de las futbolistas feme- ninas en el Perú no es remunerado como en el caso del fútbol masculino. Una de las razones es el bajo consumo de fútbol femenino por el público, que a su vez se debe a la poca difusión que tiene desde hace años. La apuesta de los clubes por formar sus equipos de mujeres se dio recién el 2019, tras una orden de Conmebol en la que indicó que cada equipo de la Liga Profesional de Fútbol debería tener una división femenina, y algunos decidieron invertir en ello. Sin embargo, la falta de presupuesto de algunos clubes hace que la inversión no sea la adecuada para que las futbolistas se dediquen de forma profesional. Muchas realizan otras actividades para generar ingresos que les permitan sobrevivir. Lo de Alianza en la última Copa Libertadores ha hecho que los clubes y la Federación Peruana de Fútbol consideren profesio- nalizar el fútbol femenino e invertir para tratar a las jugadoras como verdaderas profesionales.

Periodista en el suplemento Domingo de La República. Licenciada en comunicación social por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y magíster por la Universidad de Valladolid, España. Ganadora del Premio Periodismo que llega sin violencia 2019 y el Premio Nacional de Periodismo Cardenal Juan Landázuri Ricketts 2017. Escribe crónicas, perfiles y reportajes sobre violencia de género, feminismo, salud mental y tribus urbanas.