Domingo

Colores y trazos del Perú

El investigador Gonzalo Zegarra y la ilustradora Mariana Bahamonde presentan el primer atlas ilustrado para niños en el que se revalora la herencia cultural, historia, gastronomía y biodiversidad del país.

En tiempos de virtualidad efervescente, cada vez menos niños experimentan el goce del papel, ese tacto especial, el olor de las páginas. Cada vez menos estudiantes recurren a los atlas, imponentes y rigurosos, porque Google puede despejar cualquier inquietud y arrojar todo al alcance de un clic. ¿De qué manera podría aportar un material de este tipo en medio de una dinámica social al frente de las pantallas? El periodista e investigador Gonzalo Zegarra elucubró esa pregunta cuando tomó la edición general de Atlas del Perú (Pichoncito, 2021), el primer y único atlas para niños con reseñas de lo mejor y más representativo de cada región del Perú, el cual fue ilustrado por Mariana Bahamonde.

“Intentar poner al alcance de los niños una comprensión integral de nuestro país ha sido un gran desafío —dice Zegarra—. Por un lado, es una manera de volver a ese documento acaso olvidado, casi pasado de moda, como es el atlas; y por otro, una manera de redescubrir y revalorar la herencia cultural, biodiversidad e historia de un Perú aquejado por sus quiebres”.

Se trata de un libro compuesto por 26 mapas ilustrados y más de mil datos que apela a una estrategia lúdica para entender al país de todas las sangres. “A través del libro, por ejemplo, un niño de Ayacucho puede enterarse cómo vive otro pequeño en Iquitos o Piura —sigue el investigador—. De esa manera podrá tener una mirada menos separatista, digamos. Eso es lo más reconfortante del movimiento artístico: lo que rompe la política, el arte lo subsana. Desde luego, es una declaración bastante optimista”.

Tras varias semanas en la gesta del proyecto, Zegarra ha ratificado que la vasta diversidad del Perú puede ser también la causa de sus dificultades para organizar una convivencia funcional. “Nos aferramos a la diferencia para que prevalezca nuestra especificidad –'mi’ forma de ser peruano–, en lugar de reconocernos mutuamente y buscar denominadores comunes”, ha escrito en una reciente columna. Plasmar esa complejidad en un atlas le permitió retornar “a ese Perú tangible, cotidiano de mi infancia, para incluir todos sus elementos en un compendio gráfico, explícito, barroco, inmenso, que sueño contribuya a que las generaciones posteriores encuentren más fácil de entender este querido, emocionante, inefable país”.

El libro ya se encuentra disponible en las principales librerías a nivel nacional como Book Vivant, El Virrey, La Rebelde, Librería Sur y Crisol. Para difundir su propuesta, Ediciones Pichoncito ha anunciado la donación de ocho mil ejemplares a diversas escuelas del país, incluyendo la red de colegios Fe y Alegría.