Phillip LopateEnsayista norteamericano.,En uno de mis textos preferidos de su magnífico libro de ensayos literarios Retrato de mi cuerpo, Phillip Lopate, escritor, profesor de literatura y gran cinéfilo nacido en Brooklyn –con quien me encontré en Sao Paulo hace unos días, durante el Festival Serrote, organizado por la revista de cultura, ensayo y artes visuales del mismo nombre– no le perdona la vida ni a su pobre pene, con el que se ceba especialmente. La auscultación de sus partes se convierte en un tratado sobre la masculinidad y en una reivindicación de nuestra humanidad imperfecta. Lopate quizá no es tan conocido como su amiga, la escritora también neoyorkina Vivian Gornick, pero son considerados dos grandes maestros de las memorias y el ensayo personal. El escritor Jonathan Lethem, en el prólogo de Apegos feroces de Gornick, dijo que ella y Lopate “me han enseñado todo lo que sé sobre limpiar las tonterías que uno escribe sobre sí mismo”. A mí también. Usted es un defensor de la escritura “contra algo”, por ejemplo, escribió Contra la alegría de vivir. ¿Contra qué escribiría hoy para sorprendernos? He escrito en el pasado muchas piezas “en contra de”. Me pidieron que escribiera sobre el holocausto, porque soy judío, y escribí Resistance to the Holocaust que no negaba el Holocausto, ojo, sino el chantaje emocional del holocausto. Así que me gustaría revisar esa resistencia que hay en mí. Cuando tengo que escribir algo me cuesta mucho entrar en el tema y me pregunto por qué me resisto. El psicoanálisis analiza la resistencia del paciente, algo que es muy importante, yo trabajo creativamente con esa resistencia. Y una de las cosas que siempre intento examinar es “qué es lo que realmente pienso y siento de este asunto”, no lo que “debería pensar” del mismo. Entonces lo que intento es lidiar con la ambivalencia. Porque antes de “ir a la contra” está la ambivalencia. Y la ambivalencia es muy útil para trabajar, es como si pusieras a dialogar dos partes distintas de tu cerebro. Hay gente cansina que se sigue preguntando ¿por qué a alguien le importaría mi vida, a quién puedo importarle yo? Bueno, Montaigne decía que “cada persona porta la forma entera de la condición humana”… En ese sentido, uno no escribe solo sobre uno mismo, escribe sobre toda la humanidad. Si lo piensas, es uno de los fundamentos del humanismo, que una persona puede representar a la humanidad. Yo no creo que “yo” sea tan importante, o “mi” cuerpo o “mi” mente, pero creo de alguna manera es una forma de modestia el plantearlo de esta manera: “Ok, voy a empezar por mí, que es algo que conozco y sobre lo que tengo curiosidad”. Quiero decir, no se trata de defenderme a mí mismo de algo, estoy más interesado en preguntas como ¿por qué cometo los mismos errores siempre?, ¿por qué sigo esos patrones de autodestrucción? O incluso ¿dónde están mis propias fortalezas? ¿Cuál es la diferencia entre el proceso de un novelista y un ensayista? Creo que el proceso fisiológico es diferente… Cuando escribo un poema siento que se me revuelve el estómago y es como si tuviera que seguir esas olas hasta el final del verso; cuando escribo ficción es como si me metiera en un sueño e imaginara cosas, es como sumergirse en el agua o vivir dos vidas al mismo tiempo, la real y la inventada; y me gusta escribir ensayos porque es como si pudiera mantenerme sano, en equilibrio, siguiendo mis propios pensamientos. Hay algo intrínsecamente racional en el género que no tiene nada que ver con la psicosis. Hay muchísima ficción contemporánea que es como tener delante a un persona demente, pero un buen ensayo nunca está “loco”, quizá es irritante pero no “loco”. Creo que al final creo en la razón. Usted dijo: “Ser escritor es un acto de una arrogancia monstruosa”. ¿Cómo se soporta? Oh, verás, soy profesor y uno de los grandes problemas a los que se enfrentan mis alumnos es a la falta de confianza en sí mismos, la falta de arrogancia, si prefieres; siguen arguyendo eso que decías “¿a quién le importo yo?”. Y, ¿sabes?, creo que esa es una especie de falsa vanidad. Vale, no me importa demasiado quién seas, pero me importa algo… Creo que para escribir tienes que proyectar al menos cierto sentido de confianza, aunque escribas sobre tu propia ignorancia, o tu propia falta de confianza. Como si estuvieras en un escenario. Usted ha escrito muchas veces sobre la amistad. ¿Cómo ve la idea de tener 5 mil amigos en Facebook? La amistad es muy importante para mí. Es tan importante que no tengo Facebook. ¿Cómo ve un intelectual como usted a un Trump? Bueno, antes que nada, la elección de Trump ha sido uno de los grandes desastres de mi vida. Me gustaría recordar que la mayoría de norteamericanos no votamos por él, pero ganó por nuestro ridículo sistema electoral. No lo pienso tanto en términos de EEUU, creo que hay un neo-neoliberalismo global, de Polonia a Inglaterra con el Brexit, que potencia los nacionalismos, algo que ya es muy lamentable y sí, Trump es de lejos el más estúpido de todos esos nuevos líderes. De hecho, es un idiota. Pero en Hungría o Turquía hay presidentes que no parecen tan imbéciles pero que hacen lo mismo, manipular los miedos de la población en lugar de fomentar la tolerancia. Trump es solo un ejemplo. Y por cierto, no te voy a molestar a ti preguntándote por los políticos peruanos… [risas]. ¿Qué le espera a este señor? No creo que gane una segunda elección. Incluso puede que haya una interpelación y le echen. No sé, estaba tan obsesionado con todo esto durante la campaña que al final decidí por salud mental ponerme a dieta de Trump. Claro, todo mi entorno está en contra de Trump, leemos los mismos periódicos, llegamos a las mismas conclusiones y básicamente nadie sabe bien qué va a ocurrir. ¿Escribirías sobre feminismo o contra él? No estoy en contra del feminismo. Siempre he intentado ser un aliado del feminismo, porque muchas de mis amigas, como Vivian Gornick, son muy activas en él. Si lo pienso un poco, el feminismo ha sido el más importante movimiento político de mi vida. Es muy complicado para un hombre escribir con honestidad sobre las mujeres. Pero como te digo, he pasado mi vida adulta a la sombra del feminismo, así que sí, escribiré sobre eso.