El gobierno de Dina Boluarte reclamó la presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico mediante una comunicación a las cancillerías de México, Colombia y Chile, en la que planteó realizar una consulta al respecto. Sobre ello, alertó que si el país que representa Andrés Manuel López Obrador no formaliza el traspaso "acarrearía responsabilidad internacional".
"En la fecha, el Gobierno del Perú ha planteado la realización de consultas entre todas las partes del acuerdo marco de la Alianza del Pacífico a fin de llevar a cabo el traspaso de la presidencia pro tempore al Perú, sin mayores dilaciones", señaló la Cancillería peruana en un comunicado.
Según información de EFE, la Cancillería puntualizó que, en esta comunicación, la primera remitida a todos los ministerios de Relaciones Exteriores de los países miembros, se invocó el principio "pacta sunt servanda". Este está consagrado en la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados de 1969, que establece que "todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser cumplido por ellas de buena fe".
Sobre las consultas referentes al traspaso de México a Perú de la Presidencia pro tempore, la gestión de Boluarte defiende que estas se contemplan en el propio Acuerdo Marco de la Alianza del Pacífico, según el cual "las partes realizarán todos los esfuerzos, mediante consultas u otros medios, para alcanzar una solución satisfactoria ante cualquier diferencia sobre la interpretación o aplicación de las disposiciones" del mismo.
"Adicionalmente, en la comunicación cursada, el Gobierno del Perú ha dejado a salvo su capacidad para utilizar los medios políticos y jurídicos a su disposición para lograr el cabal cumplimiento de las obligaciones internacionales contenidas en el Acuerdo Marco de la Alianza del Pacífico", agregó el comunicado.
Por otro lado, la Cancillería expresó su "alto aprecio" ante los diversos pronunciamientos por parte de sectores gubernamentales, empresariales y académicos, tanto nacionales como de otros países, que "coinciden en la urgente necesidad de continuar con los trabajos" de este proceso de integración regional.
"Los cuatro estados miembro debemos preservar a la Alianza del Pacífico como un mecanismo de integración económico-comercial sin politizaciones y así continuar generando oportunidades para el comercio, las inversiones y la cooperación, en beneficio de nuestros ciudadanos", insistió el ministerio. Concluyó que el gobierno de Boluarte "no renunciará a mantener viva la Alianza del Pacífico y ejercer su presidencia pro tempore, la que le corresponde de conformidad con el derecho internacional".