Colombia. El abogado Iván Duque asumió como presidente para el periodo 2018-2022 en una tarde borrascosa que interrumpió por momentos el acto celebrado en la plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá, adornado con una muestra del folclor nacional.,El abogado Iván Duque asumió como presidente de Colombia para el periodo 2018-2022 en una tarde borrascosa que interrumpió por momentos el acto celebrado en la Plaza de Bolívar, en el centro de Bogotá, adornado con una muestra del folclor nacional. Pasadas las 15.00 hora local se dio inicio a la investidura, una ceremonia sin precedentes por su diversidad y colorido, bajo un cielo gris que amenazó a lo largo de la ceremonia con dejar caer un aguacero. PUEDES VER ¿Iván Duque pidió un exorcismo para la Casa Nariño? Duque, de 42 años, y que sucede en el cargo a Juan Manuel Santos, caminó desde el Palacio de San Carlos, sede de la Cancillería, en dirección a la Plaza de Bolívar en compañía de su esposa, María Juliana Ruiz, y sus pequeños hijos Luciana, Eloísa y Matías. El presidente, del partido uribista Centro Democrático, lució un traje oscuro, del diseñador colombiano Ricardo Pava, mientras su esposa tuvo uno de color beige creado por la diseñadora Silvia Tcherassi. El recorrido se realizó sobre una alfombra azul en la que la familia presidencial estuvo precedida por una banda de gaiteros de la Armada colombiana. Frente al Capitolio Nacional, de cuyas columnas colgaban seis banderas de Colombia, una de las cuales fue arrancada por el viento, Duque juró como presidente en una tarima adornada con 15.000 flores sembradas en la sabana de Bogotá y el departamento de Antioquia (noroeste) y con el que se buscó homenajear la riqueza de flora del país. Después de jurar que cumplirá la Constitución y las leyes de Colombia, el nuevo jefe de Estado tomó el juramento a la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, primera mujer en ocupar ese cargo en el país. Los cerca de 4.000 asistentes fueron ubicados en 32 bloques de sillas, cada uno de ellos identificado con los nombres de los departamentos colombianos. Entre ellos estaban los presidentes de México, Enrique Peña Nieto; Chile, Sebastián Piñera; Ecuador, Lenín Moreno, y Panamá, Juan Carlos Varela. También los de Argentina, Mauricio Macri; Bolivia, Evo Morales; República Dominicana, Danilo Medina; Costa Rica, Carlos Alvarado; Guatemala, Jimmy Morales, y Honduras, Juan Orlando Hernández. Otros invitados fueron los exgobernantes Alan García (Perú) y Ricardo Lagos (Chile); el expresidente del Gobierno español Felipe González; y la vicepresidenta y el canciller de Paraguay, Alicia Pucheta de Correa y Eladio Loizaga, respectivamente, así como miembros de organismos internacionales. España estuvo representada por la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; el secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, y también asistió el presidente del Partido Popular, Pablo Casado. Debido a la lluvia que por momentos amenazaba con tormenta, los asistentes tuvieron que usar los paraguas transparentes distribuidos por el Gobierno colombiano y que fueron zarandeados por ráfagas de viento. Gabo en el discurso El realismo mágico de Gabriel García Márquez y el poeta español Federico García Lorca, gran exponente del surrealismo, sirvieron como inspiración al presidente colombiano, Iván Duque, en su primer discurso como mandatario. El nobel colombiano se filtró en el discurso de Duque en sus primeros compases, cuando recordaba que bajo su Gobierno se celebrará en 2019 el Bicentenario de la independencia definitiva del país y comenzó a evocar algunos de los grandes próceres. En medio de esa evocación apareció la épica garciamarquiana: "Cuando nos unimos como pueblo nada nos detiene. Cuando todos aportamos somos capaces de hacer realidad proezas propias que ni siquiera el realismo mágico es capaz de imaginar".