Los avances tecnológicos continúan transformando todos los aspectos de nuestra vida, y el mundo de la seguridad pública no es la excepción. En un sorprendente incidente en Texas, Estados Unidos, un robot policía intervino en un enfrentamiento armado y logró detener a un delincuente sin la intervención directa de los oficiales humanos. Este suceso ha puesto en el centro del debate el creciente uso de robots en tareas policiales, lo que ha generado tanto apoyo como preocupación en la sociedad.
El incidente tuvo lugar cuando Félix Delarosa, un hombre de 39 años, fue confrontado por un equipo de oficiales mientras intentaba escapar. El criminal fue sentenciado en 2017 a 20 años de prisión por elaborar y entregar una sustancia controlada. No obstante, fue puesto en libertad condicional en 2022.
Una vez en las calles, el hombre violó su libertad condicional al manipular el dispositivo que rastrea sus movimientos, por lo que el Departamento de Justicia Criminal de Texas emitió una nueva orden de arresto.
Durante el enfrentamiento en un hotel, el sujeto disparó a los oficiales y atacó al robot con una sábana, en un intento desesperado de escapar. Sin embargo, este no era cualquier máquina, sino un dispositivo altamente equipado con tecnología avanzada que le permitió esquivar los disparos y actuar con precisión. En un movimiento inesperado, el robot atropelló al sospechoso y luego liberó gas lacrimógeno para inmovilizarlo.
La escena fue capturada en imágenes compartidas por las autoridades en la red social X, mostrando el momento en que la máquina logró someter al delincuente. Delarosa, al verse incapacitado, no tuvo otra opción que rendirse. A pesar de sus intentos por liberarse, la intervención del robot fue clave para evitar que la situación escalara y causara más daños.
Este caso ha reavivado el debate sobre el uso de robots en la policía. Mientras algunos ciudadanos aplauden el éxito de la tecnología en controlar una situación peligrosa sin poner en riesgo la vida de los oficiales, otros se preguntan si este avance tecnológico plantea problemas éticos. ¿Qué tan preparados estamos para aceptar que las máquinas intervengan en situaciones críticas? Y más importante aún, ¿hasta qué punto debería dependerse de ellas en la seguridad pública?
Al ser intervenido por el robot, al hombre no puso resistencia y fue trasladado a una prisión local después de que le trataran las heridas en un hospital. Foto: composición LR/X/@eventmund
El uso de robots en operaciones policiales no es nuevo, pero su capacidad para intervenir de manera efectiva en enfrentamientos armados es relativamente reciente. Algunos expertos aseguran que los robots pueden ser una herramienta valiosa en escenarios peligrosos, reduciendo el riesgo de bajas humanas. Sin embargo, surgen interrogantes sobre el potencial uso excesivo de la fuerza o la falta de control directo sobre estos dispositivos.
El arresto de Félix Delarosa marca un antes y un después en la forma en que las autoridades pueden responder ante situaciones de riesgo. Aunque el delincuente fue llevado al hospital antes de ser puesto bajo custodia, su caso destaca la creciente presencia de robots en el campo de la seguridad pública. Los expertos creen que este incidente podría ser solo el comienzo de una nueva tendencia en la que los robots desempeñarán un papel cada vez más importante en las operaciones policiales.