Si el programa de parole humanitario en Estados Unidos fuera eliminado, los inmigrantes que ingresaron bajo este estatus podrían enfrentar la deportación. Este programa, creado en abril de 2022, permite la entrada segura de inmigrantes de países en crisis como Venezuela, con una autorización de dos años y permiso de trabajo.
Pero, estos deben regularizar su situación migratoria durante este periodo para evitar ser deportados. Una de las soluciones más demandadas por este grupo de inmigrantes es la de solicitar el asilo, ante la presunción de peligro de persecución en su país de origen.
Un ciudadano venezolano que se encuentre en Estados Unidos puede solicitar asilo sin importar su estatus migratorio, siempre y cuando presente la solicitud dentro del primer año desde su llegada al país.
Sin embargo, perderá esta posibilidad si presenta la solicitud después de haber estado en EE. UU. por más de un año, a menos que pueda demostrar cambios significativos que afecten su elegibilidad o circunstancias extraordinarias que justifiquen la demora en la presentación de la solicitud.
Para ser elegible, debe demostrar que en su país de origen ha sufrido o teme sufrir persecución por motivos de religión, nacionalidad, ideología política, raza o pertenencia a un grupo social.
El parole humanitario requiere que los beneficiarios tengan un patrocinador en Estados Unidos, quien asume la responsabilidad de sus gastos. Este patrocinador debe ser un ciudadano o residente permanente legal. Si el programa se elimina, los inmigrantes que no hayan ajustado su estatus migratorio podrían ser obligados a abandonar el país o enfrentar procesos de deportación.
En tanto, exfuncionarios del gobierno de Donald Trump en USA han propuesto el plan de deportaciones conocido como Proyecto 2025, que busca cambiar el sistema migratorio actual mediante acciones ejecutivas. Este proyecto legislativo incluye la eliminación de programas humanitarios y la aceleración de las deportaciones, incluso en lugares sensibles como iglesias, escuelas y hospitales.
En caso de que el parole humanitario sea eliminado, los inmigrantes deben actuar rápidamente para ajustar su estatus migratorio. Esto puede incluir solicitar asilo u otros beneficios migratorios disponibles. La falta de acción podría resultar en la pérdida de su estatus legal y la deportación.
Estados Unidos ha reactivado el programa de Parole Humanitario para venezolanos, haitianos, cubanos y nicaragüenses, tras una pausa iniciada en julio debido a denuncias de fraude masivo. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) implementó nuevas medidas para reforzar la integridad del programa, incluyendo controles más estrictos de antecedentes penales y financieros de los patrocinadores.
El DHS se comprometió a sancionar a quienes cometan fraude y destacó que el programa ayuda a disuadir la inmigración ilegal. Desde su inicio en octubre de 2022, más de 2.6 millones de personas han solicitado el Parole Humanitario, y más de 530,000 han recibido autorización para viajar. Para solicitar este programa, tanto el solicitante como el patrocinador deben cumplir estos requisitos:
El solicitante:
El patrocinador: