A sus 74 años, este empresario ha pasado de lavar platos por 1.20 dólares la hora a ser propietario de un equipo de la NFL y un club histórico de la Premier League. Su historia es un ejemplo de superación y éxito en el competitivo mundo de los negocios deportivos, donde también ha incursionado en la lucha libre profesional. Su impresionante fortuna, que supera los US$11 mil millones, lo posiciona como uno de los magnates deportivos más influyentes del mundo.
Con una visión estratégica y un fuerte compromiso con la filantropía, ha demostrado que su impacto va más allá del éxito financiero. Actualmente, es propietario de los Jacksonville Jaguars en la NFL, y del Fulham FC, uno de los clubes más icónicos del fútbol inglés.
Este exitoso empresario, que emigró a Estados Unidos a los 16 años, se ha consolidado como una de las figuras más importantes en el ámbito deportivo. En 2011, hizo historia al adquirir los Jacksonville Jaguars, convirtiéndose en el primer extranjero en ser dueño de una franquicia de la NFL, por un valor de US$770 millones.
No satisfecho con su presencia en el fútbol americano, dos años después amplió su portafolio deportivo adquiriendo el Fulham FC, equipo de la Premier League, por una suma cercana a los US$200 millones. Ambos movimientos lo convirtieron en un jugador clave en el deporte mundial, con un pie en dos de las ligas más importantes del planeta.
Shahid Khan compró los Jacksonville Jaguars en el 2011, siendo el primer extranjero en tener acciones de un club de la NFL. Foto: The Independent
Nacido en Lahore, Pakistán, en 1950, el empresario Shahid Khan proviene de una familia de clase media que valoraba la educación y el trabajo. A los 16 años, decidió mudarse a Estados Unidos con la esperanza de forjarse un futuro mejor. Llegó con apenas 500 dólares en el bolsillo y se matriculó en la Universidad de Illinois para estudiar ingeniería industrial.
Su primer empleo fue lavando platos en un restaurante local, ganando 1.20 dólares por hora. Sin embargo, su esfuerzo y determinación lo llevaron a graduarse en 1971. Poco después, ingresó en la industria automotriz, donde inició su carrera como director de ingeniería en Flex-N-Gate Corporation. En 1978, fundó su propia empresa, Bumper Works, y dos años más tarde, adquirió Flex-N-Gate, consolidando su fortuna.
Shahid Khan trabajó en Flex-N-Gate, con el paso del tiempo, compró el negocio. Foto: Flex N-Gate
La fortuna de Shahid Khan ha crecido significativamente a lo largo de los años y hoy supera los US$11.300 millones. Este logro lo coloca entre los magnates más poderosos del mundo, gracias a su capacidad de diversificar sus inversiones. Además de sus equipos deportivos, sigue liderando Flex-N-Gate, una empresa que actualmente emplea a más de 26.000 personas en más de 60 fábricas en todo el mundo.
Su éxito también ha llegado al entretenimiento. Como cofundador de All Elite Wrestling (AEW), una empresa de lucha libre profesional que rápidamente ha ganado popularidad, Khan continúa demostrando su habilidad para identificar oportunidades en diferentes industrias.
Comprometido con causas sociales, ha donado millones a proyectos educativos, de salud y desarrollo comunitario, tanto en Estados Unidos como en Pakistán, mostrando que su legado va más allá de los negocios y tiene un profundo impacto en las comunidades.