No hay mejor forma de homenajear el aniversario número 95 de del club peruano Universitario de Deportes que recordando esa curiosa relación que tenía su máxima leyenda Lolo Fernández con la malla que nunca dejó de usar en la cabeza y que lo acompañó en todos sus partidos.
Doble celebración. Solo 18 días antes de que Universitario de Deportes cumpliera 95 años, el 20 de mayo de 2019, la leyenda crema, Teodoro Fernández Meyzán, mejor conocido como Lolo Fernández, habría cumplido 106 años.
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Cada vez que los hinchas evocan a Lolo Fernández siempre son embargados por la nostalgia. No solo porque fue uno de los máximos goleadores, porque ostentó un juego lúcido y además encabezó varios campeonatos para la crema sino también porque fue el promotor y prototipo de la garra y pasión que hasta hoy caracteriza a Universitario de Deportes.
Lolo Fernández fue un jugador que compiló una increíble cantidad de anécdotas en el balompié. Por ejemplo, su sobrino Jorge Fernández contó alguna vez que su tío tuvo que sacarse las zapatillas en un partido en Europa por orden del árbitro, quien pensó que encontraría algún dispositivo que le daba fuerza a su remate. Obviamente, no encontró nada.
En otro llamativo acontecimiento, el arquero de Alianza Lima, ‘Prisco’ Alcalde, sufrió un desmayo después que le cayera en la cabeza un disparo de tiro libre del ‘Cañonero’. Al portero le diagnosticaron conmoción cerebral leve.
Sin embargo, una de los sucesos que más llamó la atención fue la relación que tuvo el delantero con la redecilla que usaba en su cabeza. Según un medio local, el ‘Cañonero’, como también le apodaban, usaba la malla en homenaje a su progenitora, Raymunda Meyzán, quien se lo había tejido como protección de salubridad y limpieza. La mamá también usaba uno igual porque se desempeñaba como cocinera.