La tarde del último 12 de mayo se registró un sismo de 5.5 en Lima, con epicentro en Chilca. Al ser de regular intensidad, el movimiento telúrico sorprendió a los ciudadanos, aunque no generó alerta de tsunami.
Como nuestro país se encuentra en el cinturón de Fuego del Pacífico, es común que haya una mayor actividad sísmica. Ante ello, debemos estar prevenidos y siempre tener a la mano nuestra mochila de emergencia, pues los temblores pueden ocurrir en cualquier momento.
Si bien es usual que en Perú se registren sismos, no se pueden descartar los terremotos, los cuales sí pueden ocasionar grandes daños y hasta pérdidas humanas. Por ello, rememora el último gran terremoto que pasó en Lima, cuya magnitud fue tanta que destruyó una gran parte de la capital y dejó un saldo de cientos fallecidos y miles de heridos.
El 3 de octubre de 1974, es decir hace 48 años, se produjo un terremoto tan devastador que destruyó varias zonas de Lima y el sur chico. Tuvo una duración de 2 minutos y 15 segundos y su epicentro se ubicó a 90 kilómetros al sur oeste de la capital, alcanzando una magnitud de 7.7 grados en la escala de Richter.
Después del movimiento telúrico, se generó un tsunami con olas de hasta 5 metros, registrándose también más de mil réplicas que ocasionaron daños materiales y humanos. También se fue la luz y las señales de radios, así como las líneas telefónicas colapsaron.
Por si fuera poco, ese mismo día hubo 25 réplicas de regular intensidad, a las que se sumaron otras microrréplicas. Al día siguiente, otro hecho que causó temor en la población fue el extraño movimiento del mar en algunas zonas del sur chico, pues este se retiró decenas de metros más allá de la orilla y todos pensaron que se aproximaría un tsunami. Pero solo hubo fuertes marejadas, las cuales hicieron que los botes en las playas de Pisco terminaran en la Plaza de Armas.
Este terremoto no solo afectó Lima Metropolitana y Callao, sino también otras ciudades.
Según el reporte histórico del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), se registraron 252 fallecidos, un total de 3.600 heridos y más de 300.000 damnificados. Mientras que las perdidas económicas ascendieron a más de 2 mil 700 millones de soles.
Las ciudades con más daños registradas fueron Lima, Cañete y Huacho. Sin embargo, en los distritos de Lima Metropolitana como el Rímac, Barrios Altos, La Molina, Lima Cercado, Chorrillos y Barranco también hubo severos daños de infraestructura.
Cuatro años antes del terremoto en Lima, en Yungay (Ancash) ocurrió otro de 7.9 grados, por lo que Defensa Civil tuvo una mejor solvencia técnica y humanitaria a la hora de enfrentar la emergencia.
El Sistema de Alerta Temprana ante Sismos y Desastres (Sismate) del Ministerio de Transportes y Comunicaciones está habilitado para enviar avisos a los ciudadanos que cuenten con línea móvil activa a través de un mensaje de texto.
En diálogo con TV Perú, un funcionario del MTC explicó que “el sistema sirve para mejorar la capacidad de respuesta de las personas, como de las que van a ir a ayudar a los ciudadanos en caso de cualquier desastre como sismo e inundación”.