A pocos días de culminar el año, los peruanos han sido testigos de la reinvención de centenares de negocios. Unos tuvieron que alejarse rotundamente de sus rubros, mientras que otros encontraron más de una oportunidad en internet. Tal es el caso de las ferias del libro del Perú, que captaron la atención de más jóvenes a través de las redes sociales.
La gran cantidad de reproducciones de las transmisiones en vivo de la Feria Internacional del Libro de Lima (FIL Lima), Feria Ricardo Palma y la AntiFil es una evidencia de que la literatura no estuvo convaleciente en esta pandemia. Cual personajes del Decamerón, los peruanos huyeron de la “peste” y se encontraron en el camino con escritores y libros digitales. La villa fue reemplazada por una habitación que, en el mejor de los casos, contaba con una computadora para ver las diversas actividades de las ferias.
El 21 de agosto fue un día clave en el mundo de las letras, pues la FIL Lima tuvo un proceso de metamorfosis con la finalidad de difundir tópicos literarios y de coyuntura a los lugares más recónditos del Perú. En esta fecha, se desarrollaron actividades virtuales como presentaciones de libros, conversatorios, conciertos, entre otros. En total, fueron más de 300 actividades, en las cuales participaron el escritor cubano Leonardo Padura, el cronista mexicano Juan Villoro y la periodista Lydia Cacho.
La virtualidad también se apoderó de la Feria del Libro Ricardo Palma en este año. Antes de la pandemia, caminar por el Parque Kennedy y detenerse en un stand para hojear los libros era un privilegio que quizás muchos no notaron. Algunos lectores se acercaban sigilosamente a los libros para olerlos: toda una osadía.
Pedro es un joven de 20 años que, pese a estudiar ingeniería, escribe cuentos. Su pasión por la literatura se gestó en una academia preuniversitaria. Él y sus amigos afirman que las ferias del libro del 2021 deberían ser semipresenciales. “Tengo la fe de que las ferias abrirán sus puertas con los protocolos de bioseguridad”, expresó.
“Si las clases escolares en marzo inician con la modalidad semipresencial, las FIL Lima, Feria Ricardo Palma y la Antifil también deberían tener esa misma línea”, añadió.
Respecto a este tema en cuestión, el escritor Jeremías Gamboa planteó una alternativa para seguir en contacto con la literatura. “Sin vacuna me parece que sí podríamos pensar en una feria presencial, cumpliendo con los protocolos de bioseguridad. Transmitir las presentaciones de libros y conversatorios vía estreaming sería una alternativa ante el aforo establecido por las autoridades”, aseveró.
Franco Osorio, gestor de la AntiFil, se mostró optimista cuando le preguntamos sobre la posibilidad de congregarnos en un local. “El otro año estamos pensando hacer un evento mixto entre lo virtual y lo presencial. Ojalá haya las condiciones para que nos podamos volver a juntar. Estamos pensando a mediados de año volver a realizar la feria. Lo virtual tiene que perdurar en el tiempo”, indicó.
La virtualidad de las ferias literarias ha permitido que los escritores participen en diversos conversatorios y presentaciones de libros de varios países. En estos tiempos adversos, una silla giratoria ha reemplazado a los cómodos asientos reclinables de los aviones.
El autor de Contarlo todo recordó el día en que rechazó varias invitaciones de ferias que se desarrollaron en el interior del país. Esto sucedió cuando publicó su primera novela. “Cuando publiqué el libro hace varios años, recibí muchas invitaciones regionales que tuve que rechazar”, confesó. “Si ahora publicara una novela, estaría en todas las presentaciones”.
Muchas personas se muestran ansiosas cuando llega el mes de diciembre. Uno de los motivos de este estado de zozobra del ánimo es querer encontrar el regalo perfecto para sus amigos y familiares. Frente a ello, la Feria del Libro Ricardo Palma se erigió como una alternativa interesante para comprar libros. A través de su página web, el público eligió novelas, cuentos y poemarios.
A través de las redes sociales (Facebook, Instagram y YouTube), el público pudo participar de las actividades culturales. Cabe mencionar que los escritores Rosa Montero y Ricardo Sumalavia fueron los encargados de abrir la feria.
Es preciso mencionar que el presidente de la Cámara Peruana de Libro, Willy del Pozo, dedicó un emotivo mensaje a los amantes de la lectura en el día de la inauguración.
“Estos difíciles momentos no van a impedir que sigamos escribiendo y reescribiendo nuestra historia en esta cruzada emancipadora desde la cultura que se verá coronada el próximo año, cuando conmemoremos el bicentenario de la proclamación de nuestra Independencia. Hoy debemos seguir en la brega, en el camino trazado por nuestros inmortales, por los versos delirantes del patriarca Corcuera, por la juventud aguerrida de Heraud, por la humanidad de Vallejo, ahora más vigente que nunca (…)”, expresó con énfasis.
La literatura siempre nos ha acompañado en tiempos adversos como la pandemia del coronavirus. Miles de personas esperaban con ansias la notificación “… está transmitiendo en vivo” para iniciar el viaje por el mundo de las ideas. Incontables reproducciones, comentarios y compartidos en las redes sociales nos hacen pensar que la juventud está ávida de aprehender los libros. Hay, lectores, muchísimo que leer.