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¿Por qué no se deben lamer los cartuchos de videojuegos de Nintendo Switch?

Mantén estas piezas lejos de los más pequeños. Curiosamente, los cartuchos de videojuegos de la Nintendo Switch no deberían lamerse y aquí te contamos la razón.

Debes mantener estos artículos lejos de los más pequeños en casa. Foto: composición LR/Gamecored
Debes mantener estos artículos lejos de los más pequeños en casa. Foto: composición LR/Gamecored

La frase “no te metas eso a la boca” es de las más usadas por los padres hacia sus hijos cuando son niños o bebés, aunque también se le podría decir a algunos gamers. Por más extraño que suene, hay usuarios que se han atrevido a ‘probar’ algunos elementos de las consolas, tales como CDs, mandos, cables y más, con el fin de reconocer qué sabor tienen.

Con la llegada del Nintendo Switch, se dejaron los CD vistos en ambas versiones de la Wii para regresar a los clásicos cartuchos, aunque ahora serían más pequeños y fáciles de ingresar a las máquinas de la gran N. Ciertas personas quisieron comprobar qué tan bien o mal saben estos componentes, por lo que lamieron este artículo y publicaron su impresiones por medio de las redes sociales. Así contaron que saben amargo, a tal punto de calificarlos como “auténticamente horrible”.

Esto se debe a que la desarrolladora japonesa utilizó un material pensado para que nadie se atreva a probarlos, chuparlos y mucho menos comerlos. Precisamente, el compuesto químico que se aplica en ellos es el benzoato de denatonio, una sustancia que la propia compañía ya ha salido a informar que no es tóxica, sino que funciona prácticamente como un saborizante que le da ese toque desagradable.

El reconocido medio gaming Kotaku envió sus apreciaciones a Nintendo sobre esta sustancia para evitar la ingestión accidental en los más pequeños. Mencionó que es lo peor que puedan haber probado, pero que, efectivamente, sí funciona para repeler estas acciones por parte inexpertos.

Obviamente, esta solución es mucho mejor a los métodos que se tenía años atrás, ya que algunos usuarios aplicaban alcohol metílico, pinturas, anticongelantes, solventes, barnices y otras cosas que se les pone a las uñas de las personas que gustan comérselas para que no hagan lo mismo con estas piezas.