Estados Unidos

Es oficial en Nueva York: desde esta fecha dejará de funcionar histórica identificación de la ciudad

La Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) confirmó la retirada de esta identificación, en una transición hacia el nuevo sistema de pago OMNY.

La MTA confirma la eliminación de la MetroCard, que dejará de venderse el 31 de diciembre en Nueva York Foto: Atlas Academy
La MTA confirma la eliminación de la MetroCard, que dejará de venderse el 31 de diciembre en Nueva York Foto: Atlas Academy

La Autoridad Metropolitana de Transporte (MTA) ha confirmado la retirada de la icónica MetroCard, que dejará de venderse en estaciones de metro el 31 de diciembre y en comercios minoristas como farmacias y bodegas a partir del otoño. Esta decisión forma parte de la implementación total de OMNY, un sistema de pago sin contacto que comenzó a introducirse en 2019 y que, según la MTA, permitirá reducir costos operativos en al menos 20 millones de dólares anuales.

El presidente de la MTA, Janno Lieber, destacó que esta modernización no solo mejorará la eficiencia del transporte público, sino que también facilitará la implementación de nuevos descuentos y beneficios para los pasajeros. “Es el momento de despedirnos de la MetroCard y dar paso al sistema de pago del futuro”, declaró en un comunicado.

¿Cuáles son las ventajas de la nueva tarjeta en Nueva York?

En reemplazo de la MetroCard, los pasajeros podrán utilizar OMNY, que permite pagar con billeteras digitales en teléfonos y relojes inteligentes, tarjetas bancarias sin contacto y nuevas tarjetas físicas OMNY, las cuales podrán recargarse en línea, en estaciones de metro y en diversos establecimientos comerciales.

Las tarjetas OMNY tienen un costo de US$1 y están diseñadas para usuarios sin cuenta bancaria. Para facilitar la transición, la MTA instalará máquinas expendedoras de OMNY en las 472 estaciones del metro antes del otoño.

A diferencia de la MetroCard, que requería recargas frecuentes y podía presentar fallas técnicas, OMNY busca simplificar el acceso al transporte público, eliminando la necesidad de una tarjeta física para quienes prefieran pagar directamente con su dispositivo móvil o tarjeta bancaria.

Para quienes aún poseen saldo en sus MetroCards, la MTA confirmó que podrán seguir utilizándolas hasta que se establezca una fecha definitiva para su desactivación. Además, el saldo restante podrá ser transferido o reembolsado hasta dos años después de la expiración de la tarjeta.

Nostalgia y reacciones de los residentes en Nueva York

La desaparición de la MetroCard ha generado opiniones divididas entre los usuarios del metro. Mientras algunos celebran la modernización del sistema, otros lamentan la pérdida de un objeto emblemático de la vida urbana en Nueva York.

Tara Johnson, de 43 años, recuerda la importancia de la MetroCard cuando llegó a la ciudad siendo joven. “A los 20 años, la MetroCard era mi mapa de Nueva York”, comentó mientras viajaba en la línea L. Johnson, quien enmarcó una de sus MetroCards cuando se mudó a Los Ángeles, aseguró que conservará la tarjeta como recuerdo.

Otros, como Stacie Gorbacheva, de 55 años, técnica en emergencias médicas de Queens, consideran la MetroCard un símbolo de identidad neoyorquina. Gorbacheva, quien lleva su tarjeta colgada del cuello, planea seguir usándola como accesorio incluso cuando ya no esté en funcionamiento. “Nos representa”, explicó.

Para algunos, la MetroCard también tenía un valor práctico. Ariel Rush, gerente de restaurante en Brooklyn, acostumbraba a guardar una tarjeta extra para prestársela a amigos o familiares que visitaban la ciudad. “Era algo tangible de lo que existía antes”, comentó con nostalgia.

Un cambio que impacta a toda la ciudad de Nueva York

El retiro de la MetroCard no solo afecta a los usuarios habituales del metro y los autobuses. En septiembre, la MTA comenzó a reemplazar las tarjetas de transporte de los estudiantes de escuelas públicas por OMNY, marcando el inicio de la transición definitiva.

Esta medida forma parte de un esfuerzo más amplio por modernizar el transporte público en Nueva York. En los últimos años, la MTA ha implementado mejoras en la infraestructura del metro, incluyendo pantallas digitales con información en tiempo real y mayor accesibilidad para personas con discapacidad.

Sin embargo, algunos expertos advierten que la adopción de OMNY podría suponer un desafío para ciertos sectores de la población, especialmente adultos mayores y personas con dificultades para adaptarse a la tecnología digital. Para abordar estos desafíos, la MTA ha puesto en marcha campañas de información y asistencia destinadas a facilitar la transición.

A pesar de la nostalgia que su desaparición genera, la MetroCard sigue operativa por el momento. Los pasajeros podrán seguir utilizándola hasta que la MTA anuncie una fecha definitiva para su retiro.