Estados Unidos

¡Atención, inmigrantes en USA!: la estrategia de Trump para la deportación masiva e incremento de aranceles

Trump amenaza con aumentar los impuestos a las importaciones desde su primer día, a menos que estos países adopten medidas efectivas contra la inmigración y el tráfico de drogas. Conoce todo aquí.

Donald Trump implementaría diversas medidas contra los inmigrantes en USA. Foto: Composición LR/Static 1
Donald Trump implementaría diversas medidas contra los inmigrantes en USA. Foto: Composición LR/Static 1

El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha comenzado a utilizar la amenaza de aranceles como una herramienta para forzar negociaciones sobre inmigración y comercio. Esta estrategia busca obligar a países como México, Canadá y China a sentarse a la mesa y cumplir con sus demandas, según un funcionario de transición. Sin duda, ello generaría considerables cambios en el ámbito comercial.

Trump ha prometido aumentar los impuestos a las importaciones desde estos países desde su primer día en la Casa Blanca, a menos que se tomen medidas efectivas contra la inmigración y el tráfico de drogas. A pesar de las advertencias sobre el impacto inflacionario de estas medidas, el presidente electo parece decidido a implementar su plan.

Donald Trump implementaría políticas migratorias de gran impacto en USA. Foto: Antena 3.

Donald Trump implementaría políticas migratorias de gran impacto en USA. Foto: Antena 3.

Las publicaciones recientes de Trump en redes sociales marcan el inicio de una guerra comercial que podría tener repercusiones significativas en la economía de EE. UU. y sus socios comerciales. A continuación, se analizan los principales aspectos de esta estrategia y sus posibles consecuencias.

La amenaza de aranceles como táctica de negociación

La promesa de Trump de imponer aranceles ha sido interpretada como un primer aviso para que los países aliados y adversarios respondan a sus demandas. Según el funcionario de transición, esta táctica se basa en la creencia de que las amenazas anteriores durante su primer mandato fueron efectivas. En 2019, por ejemplo, la presión sobre México resultó en la implementación de la política de "quédate en México", que obligó a los migrantes a permanecer en ese país mientras se procesaban sus solicitudes en EE. UU.

Sin embargo, el análisis de Goldman Sachs advierte que los aranceles propuestos podrían aumentar la inflación en EE. UU. en un 0,9%, lo que afectaría directamente a los consumidores. Matt Priest, presidente de Footwear Distributors & Retailers of America, también ha señalado que estos aranceles elevarían los costos de productos básicos, como calzado, lo que podría perjudicar a los minoristas y a los consumidores.

Reacciones de los líderes latinoamericanos

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha respondido a las amenazas de Trump, afirmando que "ni las amenazas ni los aranceles resolverán el problema de la migración o el consumo de drogas". Sheinbaum advirtió que la imposición de aranceles podría desencadenar una guerra comercial perjudicial para ambas naciones, poniendo en riesgo a empresas que han estado operando en México durante décadas.

Además, los líderes de otros países de la región han expresado su preocupación por las posibles repercusiones de esta estrategia. La presión sobre México y Canadá podría complicar aún más las relaciones comerciales y políticas en un momento en que la cooperación es crucial para abordar problemas como la migración y el tráfico de drogas.

Renegociación del T-MEC y el futuro comercial de EE. UU.

Trump ha dejado claro que su intención es renegociar el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que reemplazó al Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Este acuerdo, que entró en vigor en 2020, requiere que los tres países lo renueven antes del 1 de julio de 2026. La amenaza de aranceles se presenta como una forma de obtener ventajas en las futuras negociaciones comerciales.

Los asesores de Trump han indicado que los aranceles podrían aplicarse más urgentemente a Canadá y México, especialmente después de que Canadá implementara un impuesto sobre las ganancias de grandes empresas tecnológicas extranjeras. Esta medida ha sido considerada discriminatoria y en violación del T-MEC, lo que podría dar pie a una respuesta más agresiva por parte de la administración de Trump.