¡Atención, estudiantes en EE. UU.! Escuela de Florida cierra sus puertas definitivamente tras daños por huracanes
En respuesta a los efectos de las últimas tormentas, una escuela en Florida adoptó decisiones radicales, lo que obligó a estudiantes y familias a considerar alternativas para continuar con su educación.
La temporada de huracanes en Estados Unidos dejó una huella devastadora en múltiples regiones, y ha afectado a comunidades enteras, así como sus infraestructuras. En Florida, uno de los estados más golpeados, los daños estructurales en varias áreas han obligado a tomar decisiones que impactan profundamente a sus residentes.
Entre las instituciones más afectadas, una escuela en St. Pete Beach no pudo recuperar su funcionamiento tras los estragos, marcando un precedente para los desafíos que enfrenta el sistema educativo en zonas vulnerables.
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¿Qué causó el cierre de esta escuela en St. Pete Beach de Miami?
El edificio de la escuela St. John Vianney, ubicado en la región sur de Florida, quedó severamente dañado tras el paso del huracán Helene el 27 de septiembre. Las inundaciones afectaron sistemas críticos como electricidad, ventilación, techos y estructuras básicas, que hizo inviable continuar con sus actividades normales.
Tras analizar el impacto económico y logístico que implicaría la reconstrucción, las autoridades determinaron que no era factible rehabilitar el edificio en el corto plazo. Según informes locales, los costos superan con creces los recursos disponibles, forzando la decisión de cerrar el establecimiento definitivamente.
Tras analizar el impacto económico y logístico que implicaría la reconstrucción, las autoridades determinaron que no era factible rehabilitar el edificio en el corto plazo. Foto: ABC Action News
Alternativas para los estudiantes y planes temporales
Desde el incidente, los alumnos de la institución han sido reubicados en distintas sedes para garantizar la continuidad de sus clases. Entre los lugares habilitados para recibir a los estudiantes se encuentran la Escuela Catedral de San Judas, el Centro Pastoral y la Escuela Secundaria Católica de San Petersburgo.
Aunque estas soluciones temporales han permitido mantener la educación de los alumnos, la decisión de cerrar la escuela permanentemente deja a las familias en busca de opciones a largo plazo. Las autoridades educativas analizaron posibilidades como la construcción de un nuevo edificio, pero las condiciones actuales de la región y los elevados costos hicieron que esta alternativa fuera descartada.
Impacto de los huracanes en la educación en Florida
El caso de esta escuela resalta los desafíos que enfrentan las instituciones educativas en zonas propensas a desastres naturales. Los daños no solo afectan la infraestructura física, sino también a las comunidades que dependen de estos espacios para la formación de sus hijos.
Además, este episodio refleja la necesidad de invertir en infraestructuras resistentes y en planes de contingencia que permitan mitigar los efectos de futuras tormentas. Mientras tanto, los estudiantes, profesores y padres de familia tendrán que adaptarse a una nueva realidad, buscando alternativas en medio de un panorama complejo.