Crónica: así fue la inauguración del Hay Festival Arequipa, que celebra diez años
En medio de gran expectativa, este evento cultural e intelectual celebra una década de logros, el cual debe contar con el apoyo de todos los sectores involucrados en la difusión de la cultura y el pensamiento.
Escribe: Leonela Aquino
Desde hace seis años, Paula, de 10 años, y su hermano Vicente, de 12, han hecho del Hay Festival en Arequipa una tradición familiar inquebrantable. Para ellos, este evento cultural no solo es una serie de charlas y conferencias, sino un faro de inspiración que ilumina su vida cotidiana.
Su madre, Gabriela González, comparte con entusiasmo cómo estas experiencias han impactado a sus hijos. “El festival les ha enseñado a apreciar la literatura, la ciencia y la diversidad de ideas”, asegura. Por eso, ella anima a otros padres a llevar a sus hijos a este encuentro cultural, convencida de que es una oportunidad invaluable para el desarrollo personal y cultural de los más jóvenes.
Este año, el Hay Festival celebra su décimo aniversario, y los días del 7 al 10 de noviembre marcan una nueva edición de este evento que ha crecido exponencialmente desde su fundación.
Gabriela González y sus hijos Paula y Vicente.
Cristina Fuentes La Roche, directora internacional de la Hay Festival Foundation, destaca el éxito del evento en Arequipa, gracias a la rica cultura de la ciudad y a un público generoso y festivo. “Hemos crecido en impacto y en la variedad de gente que asiste, incluyendo programas específicos para jóvenes y preuniversitarios”, comentó durante la inauguración del festival.
La directora recordó que cuando comenzaron a trabajar en Arequipa, los niños que asistían al festival tenían apenas 8 y 9 años. “Ahora son jóvenes de 20 años a quienes hemos acompañado en su crecimiento, trayendo eventos, encuentros con escritores y premios Nobel”, añadió con orgullo.
Esta experiencia ha generado un legado real en la población arequipeña, que se ha visto enriquecida por la interacción con figuras literarias y culturales de renombre.
Cada año, alrededor de 25,000 personas, incluyendo grupos de trabajo y público en general, participan en el Hay Festival. Este evento ha florecido en un entorno que, a pesar de las dificultades, sigue comprometido con la creación de espacios de reflexión y diálogo.
Un testimonio nostálgico proviene del vicepresidente honorario del festival, Hernando Torres Fernández, quien recordó los inicios del evento, cuando figuras como Mario Vargas Llosa y Patricia Llosa fueron fundamentales para su desarrollo. “El objetivo siempre fue que Arequipa se convirtiera en un punto de encuentro que potencie la reflexión y el diálogo”, señaló.
Cristina Fuentes La Roche.
El festival ha evolucionado significativamente a lo largo de los años, y sus organizadores han trabajado arduamente para adaptarse a las necesidades y expectativas de su audiencia.
Durante la inauguración, Fuentes La Roche destacó que el Hay Festival ha funcionado bien en Arequipa precisamente por su cultura propia, su público entregado y el ambiente festivo que lo rodea. “Cada edición se vuelve más rica en contenido y en diversidad de participantes”, enfatizó.
Sin embargo, la organización enfrenta desafíos, especialmente en tiempos de crisis política en Perú. A pesar de contar con el apoyo de más de 20 socios nacionales e internacionales, el respaldo del sector público ha sido escaso. Esto ha llevado a los organizadores a buscar constantemente nuevas formas de financiamiento y colaboración. “En este contexto, cada vez es más complicado llevar a cabo el evento. Estamos agradecidos por el apoyo privado, pero necesitamos más compromiso del sector público para garantizar la continuidad del festival”, admitió Fuentes.
En medio de estos retos, la importancia del Hay Festival como catalizador del turismo cultural y gastronómico en Arequipa es indiscutible. La directora del festival resaltó que no solo se trata de un evento literario, sino también de una plataforma que promueve el desarrollo económico de la región.
Vicepresidente honorario del festival, Hernando Torres Fernández.
“El festival invierte en el turismo cultural y cada año vemos un aumento en el interés de la gente por participar”, dijo. Para fortalecer esta idea, Fuentes solicitó a la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (PromPerú) que realice una encuesta para medir el grado de satisfacción de la población con el Hay Festival, asegurando que los resultados serán positivos.
Este año, el festival contará con la participación de más de 100 intelectuales de renombre, entre ellos el Nobel de Literatura Abdulrazak Gurnah, el autor Carlos Umaña y la exitosa filóloga Irene Vallejo, conocida por su obra El infinito en un junco. También estarán presentes figuras del ajedrez como Julio Ernesto Granda y reconocidos influencers peruanos como Waldir Maqque y Alessandra Yupanqui, quienes mostrarán lo mejor de la cultura peruana.
Los promotores del Hay Festival son conscientes de que la tecnología ha transformado el mundo, a menudo polarizándolo y llevando a que las personas lean menos. Consideran esencial la creación de espacios de reflexión donde se puedan compartir diversas ideas y fomentar la esperanza. “Estos escenarios se encuentran en el Hay Festival”, concluyeron, reafirmando su compromiso de seguir inspirando a nuevas generaciones en Arequipa.
El Hay Festival en Arequipa ofrece una experiencia completa para sus asistentes, quienes pueden disfrutar de conferencias, mesas redondas, talleres y presentaciones artísticas, atrayendo a un público diverso.
Más allá de la literatura, el festival aborda temas cruciales como la justicia social, el medioambiente y la política, presentados por reconocidos pensadores y creadores. El Hay Festival no solo amplía el conocimiento, sino que también impulsa un diálogo crítico sobre los desafíos actuales, convirtiéndose en un referente cultural en Arequipa.
Más allá de la literatura, el festival aborda temas cruciales como la justicia social, el medioambiente y la política, presentados por reconocidos pensadores y creadores. El Hay Festival no solo amplía el conocimiento, sino que también impulsa un diálogo crítico sobre los desafíos actuales, convirtiéndose en un referente cultural en Arequipa.