A lo largo de los años, muchos personajes de los videojuegos se han ganado nuestro cariño, respeto y admiración, pero otros se han dedicado a hacer nuestra experiencia insistentemente miserable, desde un auténtico antagónico hasta un pequeño pokémon. La natural disposición del medio para el storytelling ha hecho que, como en el cine, hayan aparecido diversas personalidades. En realidad, son una millonada de estas. Es imposible, por lógica, que todos nos caigan bien. Estos son los personajes más odiados de los videojuegos.
Los factores son tan variados como sencillos, luchadores ‘overpowered’, otros demasiado débiles, antagonistas burlones y aliados que, más que significar una ayuda, resultan completamente inútiles y hasta molestos.
Hemos reunido en un top especial a los que, a nuestro parecer, son los personajes más odiados de los videojuegos por las razones más simples, pero también complejas. Intentamos no mencionar muchos videojuegos nicho para tener certeza en que elegimos a aquellos que se han impregnado en nuestro subconsciente por su odiosidad.
Solo imagínatelo. Eres un joven de pueblo que sale de casa a temprana edad (muy temprana) rumbo a un viaje lleno de aventuras y retos para cumplir su sueño de ser campéon. Pero ¡vaya sorpresa! El nieto de tu modelo a seguir, y una de las eminencias en el tema que más te apasiona, también va por lo mismo para que te lo cruces en los momentos menos indicados con sus delirios de grandeza y hasta en el instante más crucial, cuando por fin te creías campeón de Pokémon. Todo para terminar ya sabemos de qué manera. Cómo será de molesto, que ni siquiera su abuelo podía recordar su nombre.
Gary (Blue) en Pokémon Blue, Red, Yellow
Quién no ha soportado a aquel amigo odioso que juraba ser el más pro en Tekken 3 (o cualquiera de los Tekken siguientes que no han carecido de un bailarín como Eddy Gordo). Si sonreíste al ver su nombre en esta lista es porque seguro ese amigo tuyo lo eligió y no hizo más que ‘spammear’ todo el tiempo con su ‘helicóptero’. Es más, ese que lo eligió pudiste haber sido tú, y ahora que recuerdas tus maldades, ríes.
Tekken: Eddy Gordo
Lo cierto es que el ‘spam’ con Eddy es un tema de preocupación mundial. ¿No nos crees? Aquí una prueba:
Tekken: Eddy Gordo
Vamos con un clásico. El perro de Duck Hunt es un auténtico 'troll’ de los años ochenta que ha pasado a ser ícono mundial de lo molesto y hasta persiste en su rol siendo presentado recientemente en el anuncio de Banjo Kazooie como personaje en Super Smash Bros. Ultimate (mofándose de todos nosotros, claro está). Este singular bloodhound se reía a carcajadas frente a nuestra atónita mirada cada vez que no le dabamos a un pato en Duck Hunt, algo que a todos nos pasó ¿Era necesaria tanta crueldad?
"El perro" de Duck Hunt
El ‘Super Mario World 2’ dejó a Miyamoto un poco atónito por no haber estado tan de moda como el primer Donkey Kong Country en Super Nintendo. ¿Tendrá esto algo que ver con el tan adorable Bebé Mario que teníamos que llevar con Yoshi a todas partes (hasta en su propio juego era su servidor, el pobre Yoshi) y que reventaba en llanto cada vez que se caía? Al menos la serie Donkey Kong tuvo compasión e introdujo a otro muy ‘tranquilo’ bebé para DKC3, aunque este era mucho más útil. ¿Estaban de moda los bebés o qué?
"Baby Mario" de Super Mario World Yoshi's Island
Muchos recordaremos la primera vez que jugamos al ‘primer Mario’, concatenación adrede, porque nos referimos a la versión de 1985 (que venía con el juego de los patos y el querido perro). Todo iba bien en un comienzo. Primer nivel facilísimo. Segundo nivel e ingresamos a la ‘warp zone’ para ir directo al mundo 4. Nos cuentan por allí que el segundo nivel de este mundo tiene otra zona directa al mundo 8, último mundo del título. No podemos estar más confiados. Estamos a punto de completar el juego en pocos minutos y en nuestra primera vez. Y de repente ahí aparece. Lakitu, un tímido ’koopa’ montado en una nube al estilo de Gokú. Lejos de ser carismático, este sujeto es completamente despreciable. El canalla (que parece inofensivo por sí mismo y por eso recurre a esas sucias tácticas) nos lanza del cielo puercoespines obligándonos a correr despavoridos y a quitarnos toda la confianza del inicio. Genial, Miyamoto.
"Lakitu" haciendo nuestra vida miserable.
La vida ha sido un poco injusta con Waluigi y Wario. Pero los que se llevan el premio mayor en esta lista son este par de angelitos que nos hicieron pegar un grito al cielo con tan solo sentir su presencia mientras jugábamos ‘Mario Party’, la versión de Nintendo de ‘Monopolio’. El juego es tan o hasta más efectivo en destruir amistades. Sobre todo con esas casillas que invocan a Bowser, el que es capaz de robarte todo lo que has obtenido por horas y dárselo a otro que no ha ganado nada en toda la partida, solo porque se le dio la gana. Boo, por otra parte, es más travieso, pero igual nos roba. Vaya juego y vaya par de cretinos.
Bowser de Mario Party
Nunca hay suficientes. ¿Ya no recuerdas esa interminable odisea en la cueva de Digglet? O hasta para viajar a ciudad Lavanda. Pokémon está lleno de cavernas, siempre. Y en todas ellas hay, al menos, un billón de zubat ansiosos por hacerte perder el tiempo y, si pueden, confundir a tu pokémon con su supersónico. Al final todos cedemos ante la desesperación y terminamos atrapando a uno, o dos, o cincuenta.
Zubat de Pokémon
No vamos a hacer spoiler para los que no han completado GTA San Andreas, pero los que sí lo hicimos, ya sabemos qué opinar.
Big Smoke de GTA San Andreas
Los árbitros están condenados a ser detestados hasta en los videojuegos. Pero hay que ser sinceros, si hay uno que se hizo bastante fama en el mundo de los píxeles es Kazuki Ito, aparecido en la época dorada de Pro Evolution Soccer (PlayStation 2). El japonés era el más estricto de la terna de árbitros en el juego, llegando a viralizarse hechos sobre él al mismo estilo de Chuck Norris como: “Se dice que el objetivo de Kazuki Ito no es arbitrar es destruir”, “Kazuki Ito solo lleva una tarjeta y NO es la amarilla”, “Se dice que, al nacer, Kazuki Ito expulsó al médico que le dio una palmadita”, “Si quieres ganar el partido, tarjeta roja”. La relación de Kazuki y la comunidad de PES es una de amor y odio. Pero al final, prevalece el cariño, menos en la cancha.
Kazuki Ito de PES
De las experiencias más horrorosas en toda la saga de Pokémon para cualquiera y seguramente en cualquier videojuego. Todo gracias a una pelirroja con una auténtica vaca tanque de pokémon. Ese es Miltank (más ‘tank’ que ‘vaca’) de los juegos de segunda generación (Oro, Plata, Crystal). No faltara el que diga con orgullo que solo le bastó una batalla para hacer llorar a la entrenadora. Pero, para el resto de mortales, estas fueron al menos unas tres veces. Y es que ¡cómo aguantaba ese pokémon! Whitney tampoco no ayudaba, ya que lo curaba insistentemente ni bien tenía oportunidad. ¿Cómo culparla? Con ese pokémon podía vencer a cualquiera. Lo mejor es que al derrotarla nos invadía un gran sentido de logro y todo el desprecio por Whitney se convertía en respeto. ‘F’.
Miltank y Whitney de Pokémon
Esta es una especial, pero muy clásica. Winning Eleven 3 es el primer juego de la saga de Konami en hacerse fuertemente popular, pero las estadísticas eran bastante sencillas. Por lo mismo, no faltaba el avispado que sacaba a Roberto Carlos, uno de los mejores laterales del mundo y de la historia, de su posición lateral para hacer dupla con Ronaldo (el gordo, por entonces flaco) en la delantera. Ambos con la valoración máxima en velocidad y disparo. ¿Qué nos quedaba? Pues elegir a Croacia y poner a Jarni por el lado de Roberto Carlos.
Roberto Carlos de delantero en Winning Eleven 3