El juicio oral por el caso cócteles comenzó el martes 2 de julio, con la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, como principal acusada. Se le imputan delitos de obstrucción a la justicia, lavado de activos y pertenencia a una organización criminal. En los últimos años, las investigaciones han sido lideradas por el fiscal provincial José Domingo Pérez. El fiscal presentó parte de sus argumentos acusatorios ante el Poder Judicial, buscando que la excongresista y otros 40 investigados enfrenten prisión preventiva por los delitos mencionados.
En ese sentido, según la información recopilada por el magistrado, se supo que los exdirectivos de la compañía Sudamericana de Fibras (SDF) testificaron y presentaron documentación ante el Ministerio Público, donde indicaron que el entonces principal accionista, Juan Rassmuss Echecopar, ordenó el desvío de fondos por aproximadamente US$7.6 millones para financiar las campañas electorales de Keiko Fujimori entre los años 2011 y 2016.
Domingo Pérez señala que la ex primera dama de la Nación durante el Gobierno del expresidente Alberto Fujimori habría recibido un total de US$ 17.3 millones de procedencias ilícitas. El fiscal provincial sostiene que el dinero que aportó el ex empresario representaría la mitad del dinero que recibió Fujimori Higuchi. Además, la empresa brasileña Odebrecht aportó US$ 1.000.000 a las campañas electorales de la lideresa del partido fujimorista, monto que representaría un 5% del total que acopió la entonces aspirante presidencial.
La República, a través del periodista de investigación Ángel Páez, publicó un informe detallado que revelaba que Juan Rassmuss fue un empresario que recibió beneficios durante el Gobierno de Alberto Fujimori. Cuando la tres veces candidata a liderar el Poder Ejecutivo fue consultada por el fiscal José Domingo Pérez sobre si recibió los US$ 7.6 millones del empresario, la exfuncionaria pública no respondió. Además, las declaraciones de los exintegrantes de la empresa Sudamericana de Fibras indican que Juan Rassmuss falsificó supuestos contratos de préstamos entre sus compañías para obtener el dinero que luego sería destinado a las campañas electorales de Keiko Fujimori.
Con base en la documentación proporcionada por los exdirectivos, el 2 de marzo de 2010, antes de la primera elección presidencial en la que participó Keiko Fujimori, Juan Rassmuss simuló un préstamo de 12,8 millones de dólares de su compañía South American Minerals Inc. para presuntamente financiar inversiones de Sudamericana de Fibras (SDF). Rassmuss instruyó que SDF devolviera el dinero en efectivo en su sede del Callao, y se entregara a personas designadas por él o Jaime Yoshiyama Tanaka. Yoshiyama envió a 9 personas cercanas a Keiko Fujimori, incluyendo a su excónyuge, Mark Vito Villanella. Los 9 han sido denunciados por presunto lavado de activos.
La primera entrega se realizó el 22 de septiembre de 2010 y la última el 31 de mayo de 2016, según los registros contables de SDF entregados al fiscal. Juan Rassmuss falleció el 30 de marzo de 2016; sin embargo, las aportaciones a Keiko Fujimori continuaron dos meses después. Según los registros de SDF, 2,6 millones de dólares se destinaron a la campaña de Keiko Fujimori entre 2010 y 2011, periodo en el cual ella era congresista y no informó sobre dichos fondos. Testigos como Jorge Yoshiyama Sasaki han declarado que el dinero aportado por Juan Rassmuss llegó a Keiko Fujimori.
El fiscal Pérez obtuvo copias de las extracciones de dinero que llegaron a las campañas de Keiko Fujimori, confirmando que las firmas eran auténticas. Según las declaraciones y documentos, el fiscal Pérez detectó que Juan Rassmuss obtuvo los 7,6 millones de dólares de SDF mediante un préstamo de South American Minerals, dividendos de Sudamericana de Fibras y otro préstamo para un supuesto tratamiento médico. El dinero no iba a las cuentas de Rassmuss, sino a los 9 receptores que entregaban los fondos a Keiko Fujimori.
El exgerente general y sobrino de Juan Rassmuss, Enrique Gubbins Bovet, confirmó: “El señor Juan Rassmuss hizo un préstamo a Sudamericana de Fibras en 2010 y solicitó que las devoluciones se entregaran en efectivo a personas indicadas por Jaime Yoshiyama. El dinero salió de Sudamericana de Fibras como devolución de un préstamo. Parte de los montos entregados en 2016 fueron préstamos solicitados por el señor Rassmuss y los dividendos de Sudamericana de Fibras fueron entregados a quien designara Yoshiyama”.
De acuerdo con los documentos, el exgerente general de SDF, Leandro Mariátegui Cáceres, autorizó las extracciones de la cuenta de SDF en el Scotiabank, de donde salieron los fondos que se entregaron a los enviados de Keiko Fujimori. El banco despachaba el dinero mediante vehículos de transporte Hermes hacia la sede de la compañía en el Callao, donde se guardaba en una caja fuerte hasta que apareciera Jaime Yoshiyama o algún integrante del círculo de Keiko Fujimori. Juan Rassmuss firmaba la recepción del dinero como si fuera la devolución del préstamo de South American Minerals a Sudamericana de Fibras.