Ruth Bader Ginsburg, la jueza de 87 años de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos que falleció el viernes 18 de setiembre, es recordada por forjar un camino jurídico que permitió avanzar en la lucha hacia la igualdad de género.
Ginsburg no dudó en adentrarse en un mundo donde predomina la presencia masculina, topándose con diferentes dificultades en el camino: el primero de todos fue que, cuando se graduó con las mejores calificaciones de su promoción en 1958, ningún bufete de abogados la contrató por ser mujer, según indica la agencia EFE.
Ya desde sus inicios hizo historia. Ginsburg fue parte las pocas mujeres que lograban estudiar una profesión jurídica en la Universidad de Harvard, pues, en este campo, la representación femenina se limitaba al 3%. En su biografía “My Own Words” (Mis propias palabras), la cual recoge el portal Infobae, relata que ella, junto a otras ocho féminas, compartía clases con otros 500 hombres.
En 1972, fundó el Proyecto de Mujeres de la Unión para las Libertades Civiles en América (ACLU, en inglés) junto a otras compañeras. Esta iniciativa tuvo como objetivo “cambiar las leyes para garantizar la igualdad entre hombres y mujeres”.
A lo largo de su carrera, Ginsburg creó precedentes jurídicos para desbaratar ese sistema judicial que consentía todo tipo de discriminación.
Ruth Bader Ginsbrug. (Foto: AFP)
En 1975, la jueza expuso que la discriminación por razón de género era un problema de fondo que perjudicaba por igual a hombres y mujeres. Para ello, tomó como referencia el caso de Stephen Wiesenfeld, un hombre al que el Gobierno negó un apoyo económico por viudez debido a que este era reservado solo para mujeres.
Luego de Sandra Day O’Connor, Ginsburg fue la segunda mujer en llegar a la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos, la máxima instancia judicial.
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Fue en 1999 cuando empezó su batalla contra el cáncer de colon, enfermedad que logró superar. En 2009, le detectaron cáncer de páncreas, el cual venció sin saber que reaparecería en el 2019, el cual terminó por arrebatarle la vida este 2020 .
“Las mujeres pertenecen a todos los lugares donde se toman decisiones. No debería ser que las mujeres sean la excepción” es una de las tantas frases con las que miles de personas recuerdan a Ginsburg.