La disolución del matrimonio puede influir en el proceso para obtener la residencia permanente en Estados Unidos. Es importante entender cómo un divorcio podría complicar la situación migratoria en diferentes escenarios.
Obtener una Green Card a través del matrimonio es una vía común para muchos inmigrantes en los Estados Unidos. Sin embargo, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) establece requisitos rigurosos para verificar la legitimidad de la relación. En este sentido, el divorcio puede representar un obstáculo significativo para quienes buscan la residencia permanente.
Resulta fundamental comprender cómo un divorcio impacta el estatus migratorio, especialmente cuando la Green Card se obtuvo a través de un matrimonio con un ciudadano estadounidense o un residente permanente. A continuación, se describen los casos más importantes en los que un divorcio podría complicar el proceso.
Si la Green Card es condicional y el matrimonio tiene menos de dos años, el divorcio puede dificultar la eliminación de las condiciones impuestas. En este escenario, será necesario demostrar que el matrimonio fue genuino y no solo una táctica para obtener la residencia. Aunque el divorcio representa una complicación, no impide obtener la residencia permanente si se presentan pruebas suficientes que demuestren la autenticidad de la relación.
En casos donde la residencia permanente se ha obtenido después de más de dos años de matrimonio, el divorcio no afecta la Green Card ni sus beneficios. Esto implica que, incluso tras la separación, el titular de la Green Card puede seguir disfrutando de su estatus migratorio sin mayores inconvenientes.
El proceso de solicitud de la Green Card también se ve afectado por un divorcio. Sigue teniendo en cuenta la duración del matrimonio y busca asesoría legal si es necesario. Foto: Infobae
Si el divorcio ocurre durante el proceso de solicitud de la Green Card, la situación se complica. Según el USCIS, este evento puede interrumpir la tramitación de la solicitud de residencia. No obstante, es posible continuar con el proceso si se demuestra que el matrimonio fue de buena fe. La carga de la prueba recae sobre el solicitante, quien deberá presentar evidencia que respalde la legitimidad de la relación.
El divorcio puede tener distintas repercusiones en el proceso de obtención de la Green Card, dependiendo de la duración del matrimonio y el estado de la solicitud. Es esencial que los solicitantes comprendan estos aspectos para tomar decisiones informadas y, si es necesario, busquen asesoría legal para manejar adecuadamente el proceso migratorio.