La victoria de Donald Trump generó preocupación entre los inmigrantes, especialmente por su intención de implementar medidas migratorias más severas, como deportaciones masivas y limitaciones al asilo. Esto ha dejado a millones de latinos en incertidumbre, mientras los beneficiarios del TPS urgen a Joe Biden a tomar acciones antes de finalizar su mandato en 2025.
El Estatus de Protección Temporal es una herramienta migratoria otorgada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) a personas provenientes de países afectados por conflictos armados, desastres naturales o crisis humanitarias. Este beneficio permite a los inmigrantes residir y trabajar legalmente en Estados Unidos mientras las condiciones en sus países de origen no mejoren. Actualmente, ciudadanos de 16 países, incluidos Venezuela, Haití y El Salvador, están protegidos bajo este mecanismo que ha brindado amparo a más de 860.000 extranjeros.
Extender el TPS antes de que Donald Trump asuma la presidencia no solo protegería a miles de inmigrantes, sino que también permitiría descongestionar los procesos del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS). Foto: composición LR
Con el tiempo en contra, los inmigrantes solicitan al presidente Joe Biden extender el Estatus de Protección Temporal por 18 meses más. La medida protegería a miles de latinos de posibles deportaciones y aseguraría su permiso de trabajo. En una emotiva rueda de prensa en el Parque Lafayette, líderes y beneficiarios del TPS instaron a Biden a ser “valiente” y evitar que el "sueño americano" de miles de familias se derrumbe.
La llegada de Trump a la Casa Blanca representa una amenaza directa para el TPS. Durante su anterior mandato, el presidente electo intentó suprimir el Estatus de Protección Temporal para 6 países, aunque los tribunales detuvieron la medida. Esta vez, expertos temen que Trump haya aprendido de sus errores y logre finalmente desmantelar el programa. Por ello, líderes y activistas piden a Biden a ampliar la cobertura del TPS para incluir a los ciudadanos de Guatemala, Colombia y Ecuador, quienes también enfrentan graves riesgos en caso de ser deportados.
Asimismo, la comunidad inmigrante teme que el gobierno de Trump utilice herramientas como la declaración de emergencia nacional para facilitar deportaciones masivas. Este enfoque restrictivo creará un ambiente de incertidumbre y tensión, particularmente para aquellos que se encuentran en proceso de renovación de su estatus migratorio. Con la intención de cerrar una ruta hacia la estabilidad permanente, el presidente electo podría restringir el acceso a la Green Card para los beneficiarios del TPS.
Con la promesa de imponer políticas migratorias más estrictas, que incluyen deportaciones masivas y restricciones al asilo, millones de latinos se encuentran en una situación de incertidumbre. Foto: composición LR
Extender el TPS antes de que Donald Trump asuma la presidencia no solo protegería a miles de inmigrantes, sino que también permitiría descongestionar los procesos del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS). Además, brindaría tiempo valioso a las familias para planificar su futuro. Según Oscar Chacón, de Alianza América, la prórroga automática sería una solución práctica para mitigar el impacto de las políticas de deportación masiva que se avecinan en Estados Unidos.
Organizaciones como la Red Nacional de Jornaleros (NDLON) están encabezando el llamado a la acción. Estas entidades destacan que los beneficiarios del TPS no solo juegan un papel clave en la economía de Estados Unidos, sino que también son un pilar fundamental para el bienestar de sus comunidades. Incluso los congresistas demócratas han pedido reiteradamente a Joe Biden que amplíe la cobertura para incluir a inmigrantes que llegaron después de las fechas límite actuales.