Un gran número de empresas privadas con fines de lucro realiza el pago de utilidades a sus empleados en marzo de cada año. Este derecho lo tienen todos los trabajadores que hayan cumplido la jornada máxima de trabajo establecida por el empleador, siempre que este cuente con más de 20 trabajadores.
Sin embargo, debido a un año atípico por la crisis sanitaria de la COVID-19, surgen dudas con respecto al pago de este concepto. El experto en finanzas, Jorge Carrillo Acosta, conversó con este diario y comenta puntos importantes a tener en cuenta referentes al tema.
Son un porcentaje de la renta neta (ganancias después de descontar inversiones e impuestos) obtenida por las empresas como resultado de su gestión. Es independiente del salario que perciba y los demás beneficios.
Tienen derecho a participar de las utilidades los trabajadores, en planilla, de empresas que generan renta de tercera categoría y tengan más de 20 trabajadores; con excepción de las empresas individuales, microempresas, autogestionarias, cooperativas, comunales, sociedades civiles y ONG.
Los estándares que determinan si la empresa donde laboras genera utilidades a sus empleados son los siguientes:
Lo anterior se menciona en la relación a lo establecido por la Sunat. Si no estás seguro de que la empresa cumple estos estándares, puedes realizar la consulta directamente con tu centro de labores.
No existe una fecha exacta en la cual las empresas deben realizar el pago de utilidades a sus empleados. Sin embargo, en el Perú se establece un periodo límite en el cual se deben realizar estas cancelaciones. Estas se pagan en un plazo máximo de 30 días después de que la empresa presente la Declaración Jurada Anual del Impuesto a la Renta.
Sin embargo, debido a la crisis sanitaria, “el pago de este derecho no debería sufrir cambios como omitirse o posponerse, para ello se necesitaría anuncios desde las entidades del Gobierno”, aclara Carrillo.
Las utilidades que repartirá la empresa entre sus trabajadores varían de acuerdo al sector productivo.
Los indicadores claves para calcular el monto de las utilidades son los días laborados y la remuneración que se percibe en el empleo.
Entonces, el 50% de las utilidades se calcula en función de los días que se trabajó. Aquí se consideran los días cumplidos como una jornada ordinaria y algunas inasistencias que no son consideradas como tales (descanso médico, licencias sindicales, días no trabajados por despido nulo, horas de lactancia materna o días no laborados por caso fortuito o de fuerza mayor).
El otro 50% se calcula en función de todas las remuneraciones que el empleado percibe al año. En este caso, se considera el total del sueldo sin tener en cuenta los conceptos no remunerativos como gratificaciones en julio y diciembre, asignación por educación, vales de alimentos, entre otros.
El promedio de ambos, dependiendo también de la condición del trabajador, es lo que recibirá como pago de utilidades.
Existe un límite que es el equivalente a 18 remuneraciones por cada trabajador que se encuentra vigente al cierre del ejercicio de las labores en el empleo
Para recibir las utilidades no se necesita un mínimo de tiempo de trabajo, incluso pueden ser solo algunos días, lo cual se aplica tanto para un trabajador contratado, cesado o de medio tiempo. “Si a raíz a de la pandemia te despidieron el abril del año pasado, tienes derecho a tus utilidades que debes cobrar este año”, comenta Jorge Acosta.
Los trabajadores que no recibirán este beneficio son los practicantes, pues no tienen un contrato laboral, sino un convenio de formación. Tampoco tienen este pago los que emiten recibos por honorarios porque si bien hay una relación civil no hay una relación laboral; por ende no computan para el número de trabajadores.
Lo primero que deben hacer los trabajadores es comunicarse con la empresa y si no reciben respuesta o la contestación es insatisfactoria deben recurrir a la Sunafil. Esta obligará a la firma a realizar dicha cancelación o de lo contrario se expone a pagar multas económicas.
Jorge Carrillo recomienda cuatro actividades importantes que deberían hacer una vez cobrado las utilidades:
Finalmente, el experto hace hincapié en el ahorro como estrategia fiable de cara al futuro. “La crisis nos ha enseñado a golpes lo que significa guardar el dinero, la gente ahora lo piensa mejor antes de comprar cualquier cosa. Si bien es cierto, ello puede genere en mínima medida, que la reactivación económica no sea tan rápida, también es importante para el crecimiento económico familiar”.