Aliste los binoculares. El avistamiento de aves es uno de las actividades que se realizan en Yarinacocha, destino turístico localizado a solo seis kilómetros de Pucallpa (Ucayali). , Luis Pérez / Revista Rumbos Más allá de las experiencias agroindustriales, las leyendas y los paisajes deslumbrantres, Yarinacocha (Coronel Portillo, Ucayali) es un ecosistema ideal para el avistamiento de aves. PUEDES VER: Camu camu, el milagro agroturístico de Yarinacocha Así que ni bien se huye del bullicio de las motocars de una ciudad que arde, quema y sofoca; y tras zapar de Puerto Callao, nuestras miradas se dan un buen chapuzón en la belleza única del lago más grande de la región. Lo que viene después es cortesia de la mismísima naturaleza que se muestra espléndida en este espejo de agua y en las marañas de verdor que la bordean. Mientras se navega los ojos están bien atentos para observar a las aves. Foto: Ricardo Ramos Lo que sigue es esperar y relajarse, mientras el peque-peque avanza, bajo un cielo en llamas; entonces, aparecen las primeras aves a vista y paciencia de todos. "¿Cómo se llaman esas?, ¿por qué las de allá son más blancas que las de acá?, ¿son cuervos o qué?, lanzan sus primeras interrogantes los exploradores. "Para empezar esas son las garzas blancas grandes. Las de allá son más blancas que las de acá porque son las garzas pequeñas. Y, por último, no son cuervos. Son los cormoranes neotropicales", responde las preguntas la guía Rubí Casas, quien conoce todo lo habido y por haber en la 'cuna del camu camu'. "Hasta el momento se han registrado 37 aves. Siendo las especies más abundantes las garzas, gaviotines y cormoranes", anuncia Casas. A su lado, Wilber Trujillano, el responsable de turismo de la Dirección Regional de Comercio Exterior y Turismo Ucayali, hace un gesto de aprobación. Su voz toma la batuta de la cátedra aviturísitica. "Todas ellas y las que aún no ven son bien protegidas por los nativos", ilustra. La mayoría de las aves de la laguna se alimentan de peces. Foto: Rolly Valdivia Y es que los principales guardianes de este tesoro natural son los propios habitantes de las comunidades shipibo-konibo, quienes, desde siempre, han vivido en las orillas bañadas por el lago Yarinacocha. Ellos poseen una conexión increíble con la naturaleza y son los responsables de la conservación de la avifauna. "Sabemos de su importancia. Sabemos que aceleran el proceso de la polinización de las plantas y son los perfectos distribuidores de las semillas. Por eso y mucho más las cuidamos. Además, son hijos de nuestra madre naturaleza", revela uno de los maestros de la comunidad shipiba 11 de Agosto. Más nombres. "Paucar, Martín pescador, tuqui tuqui o acana, shihuango, Víctor Díaz, trompetero, cardenal de gorro rojo, locrero, gallinazo de cabeza roja o rinahui, entre otros", Rubí pasa lista a las especies que colorean el espejo de agua o las marañas de verdor de un refugio de vida, en un destino bien conocido por su milagroso camu camu. Los datos La laguna Yarinacocha posee una gran biodiversidad. Existen también 188 especies de flora, entre árboles y arbustos; 61 tipos de peces; 20 mamíferos; y 14 reptiles. La presente gestión del Gobernador Regional de Ucayali, Manuel Gambini, a través del Directur, impulsa la pesca deportiva, las caminatas, entre otras actividades turisticas en este espacio ecológico. En Rumbo Dónde: Pucallpa - Puerto Callao (Yarinacoha). Tiempo: 15 minutos. Movilidad: S/. 1. 50 por persona en motocar. Hospedaje: Hotel Boulevard Plaza (Avenida San Martín N° 340 - Pucallpa). Información: www.dirceturucayali.gob.pe.