¿Qué es la tecnología Deepfake y cómo está siendo aprovechada actualmente?
Esta tecnología es cada vez más común en videos virales de las redes sociales. Aquí te explicamos en qué consiste, cómo funciona y para qué se usa hoy en día.
El desarrollo y avance de la inteligencia artificial ha permitido que diferentes tecnologías se potencien a gran escala. Entre las que más destacan actualmente se encuentra el Deepfake, que parece bastante simple a primera vista, pero en realidad comprende un sistema complejo que está siendo aprovechado para diferentes motivos.
En esta nota, repasaremos un poco del origen de esta tecnología, al igual que su funcionamiento y el uso que se le puede dar, el cual no necesariamente es positivo, como en algunos casos que mencionaremos a continuación.
¿Qué es Deepfake?
En primer lugar, es necesario aclarar que el término Deepfake proviene de “Deep Learning”, cuya traducción sería “aprendizaje profundo”. Además, forma parte de una de las corrientes más estudiadas para el desarrollo de la inteligencia artificial.
Habiendo explicado esto, se denomina Deepfake a aquella tecnología que tiene la intención de crear un contenido falso a través de un software que manipula datos e información en formato de video.
¿Cómo funciona el Deepfake?
El Deepfake se basa en un algoritmo de inteligencia artificial llamado codificador, el cual ejecuta miles de tomas de la cara de las personas, para luego falsificarlas y sobreponerlas sobre otro video.
En pocas palabras, funciona a través de la identificación y aprendizaje de los rostros y gestos de una identidad facial. Además, por medio de un proceso que comprime imagen y el posterior decodificador que recupera las mismas figuras logradas, realiza el intercambio de caras para reconstruirlas.
¿Cómo está siendo usada actualmente?
Los videos con Deepfake, en la gran mayoría de casos, están siendo utilizados de manera recreativa y para probar nuevos formatos en la industria cinematográfica, ya que se observa que producciones como “Star Wars” han apostado por esta tecnología para retratar rostros de actores cuando eran jóvenes para traerlos a la época actual.
No obstante, hoy en día también es una de las técnicas más complejas para poder crear fake news, es decir, noticias falsas, puesto que, además de los clones de voz, ahora es posible replicar el movimiento de algún personaje público para que parezca que está diciendo alguna declaración controversial.
Esta práctica se ha vuelto más común con el avance de la tecnología, debido a que en las redes sociales aún no hay un filtro sofisticado para este tipo de contenidos.
Científicos logran crear una computadora que ‘piensa’ como si fuera un bebé
De acuerdo a un estudio publicado por un equipo de DeepMind, en la revista internacional Nature Human Behavior, la subsidiaria de la empresa matriz de Google, Alphabet, da un paso adelante para averiguar cómo funciona el sentido común de los humanos, para poder incorporarlo a las máquinas y comprender hasta qué punto se puede desarrollar y potenciar.
Esta IA, denominada por el momento como PLATO, ha sido elaborada con el fin de actuar como un bebé, teniendo reacciones similares a las de un infante de 5 meses y un comportamiento que aprendería sobre las leyes de la física intuitiva a partir de estas experiencias.
En recientes pruebas, mostró ‘sorpresa’ cuando vio un elemento que se movía a través de otro, sin rebotar hacia atrás al impactar. Básicamente, tiene la misión de evaluar y comprender diferentes factores relacionados con el movimiento y estado de un objeto, como, por ejemplo, su permanencia; es decir, la noción de saber que este sigue existiendo aunque no esté a la vista.
Entre otros valores tomados en cuenta están su solidez (si es concreto o abstracto), su continuidad (si puede ir avanzando y desaparecer), su inmutabilidad (que no se altere si no está con algún determinante extra) y su inercia direccional (que solo cambia de dirección bajo la ley de la inercia).
Según lo publicado en Nature Human Behavior, para superar este obstáculo, el científico Luis Piloto y sus colegas de Deep Mind se inspiraron en otras investigaciones sobre cómo aprenden los bebés, para que la IA acople una cognición similar a la de los pequeños.