Poderes fácticos y golpes, por Sinesio López

“Generalmente, los poderes fácticos son los que respaldan y financian a los candidatos perdedores”.

Casi todos los presidentes de la República del 2001 en adelante fueron elegidos como candidatos de centro-izquierda. El único candidato neoliberal elegido fue Pedro Pablo Kuczynski. Pero todos gobernaron como presidentes neoliberales. ¿Qué pasó? ¿Por qué la mayoría de los candidatos fueron elegidos desde la centro-izquierda pero gobernaron para la derecha?

Traición es la respuesta más fácil. Pero no solo hay traición. Hay también presión. Quizá esta es más importante que la primera. Y ¿Quiénes son los que presionan? Los poderes fácticos. ¿Qué son y quiénes son los poderes fácticos? Se llama poderes fácticos a aquellos grupos económica, social y políticamente poderosos que no han sido elegidos, pero gobiernan o influyen decisivamente en el Gobierno. En el Perú, los poderes fácticos son los grandes empresarios (Confiep), las FF.AA y la prensa concentrada.

Generalmente, los poderes fácticos son los que respaldan y financian a los candidatos perdedores. Algunos de ellos pierden los millones con los que compran a los candidatos perdedores y no quieren seguir perdiendo en el Gobierno de los ganadores de centro-izquierda. Esto explica la presión que asume diversas modalidades: periodicazos, amenazas, chantajes, halagos.

Es difícil saber si los compraron, pero no hay que descartar esa posibilidad porque la mayoría de ellos han sido acusados de corrupción. Si compraron a algunos candidatos perdedores, ¿por qué no comprar a los que ganaron?

De los presidentes elegidos por el pueblo, tres (incluido Vizcarra, elegido con Kuczynski) han sido desbarrancados por golpes o contragolpe del Congreso después del 2016. Sorprende que los medios y los analistas olviden estos golpes parlamentarios y solo hablen del golpe que no fue. Castillo dio un discurso golpista, suicida y políticamente tonto que permitió el contragolpe del Congreso.

Un golpe es un conjunto de actos (decreto legislativo, clausura del Congreso, respaldo de las FF.AA) y no de intenciones. Castillo sabía de antemano, además, que no tenía respaldo de las FF.AA. Nadie puede dar un golpe contra la voluntad de las FF.AA.

Lo que más sorprende es la acusación de flagrancia. ¿Hay flagrancia de intenciones? Si así fuera, todos estaríamos presos. Ni Hobbes llegó a tanto entre los deberes de los ciudadanos con respecto al Estado. ¿O eso se enseña en el doctorado en Derecho de la UAP? Es obvio que el discurso golpista y suicida de Castillo le impide ser presidente. Pero él debiera estar no en la cárcel sino en un cementerio político. No tiene ningún sentido el pedido de algunos abogados de reponerlo en el cargo.

El golpe contra Kuczynski fue principalmente por despecho de la candidata perdedora que, sin embargo, controlaba el Congreso. Kuczynski no tenía apoyo del Congreso ni del país. Vizcarra no tenía apoyo del Congreso, pero sí del país.

Por eso la Chica no pudo desbarrancarlo. A Castillo no lo querían la derecha ni los poderes fácticos desde las elecciones de la segunda vuelta. Incluso inventaron un fraude inexistente. Una vez elegido, lo quisieron sacar desde el primer día de su Gobierno. Castillo careció de habilidades políticas para defenderse y cometió, además, errores y actos de corrupción.

Sinesio López

El zorro de abajo

Sinesio López. Autor de contenidos y de las últimas noticias del diario La República. Experiencia como redactor en varias temáticas y secciones sobre noticias de hoy en Perú y el mundo.