Hombre culpable de homicidio contra joven mujer es ejecutado con inyección letal luego de 21 años en EEUU
El asesino fue hallado culpable luego que en el 2004 acabara con la vida de Rachelle O'Neil Tolleson en Texas, quien ese momento tenía 20 años de edad.
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Moisés Sandoval, culpable de un homicidio contra una mujer llamada Rachelle O'Neil Tolleson en el 2004 en Texas, Estados Unidos, ha sido ejecutado con una inyección letal después de 21 años. Según documentos oficiales, el asesino, tras cometer su crimen, se encargó de enterrar el cuerpo, el cual sería encontrado por las autoridades días después.
La víctima, quien en ese entonces tenía 20 años y había conocido a Sandoval en la escuela secundaria, dejó en orfandad a un bebé de cinco meses. La justicia tardó, pero finalmente llegó el último miércoles 23 de abril, pese a los intentos de la parte legal por cambiar la pena a cadena perpetua.

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Un asesinato que marcó a una comunidad entera
En 2004, Moisés Sandoval Mendoza y Rachelle O'Neil Tolleson, ambos de 20 años, mantenían un vínculo previo desde la secundaria. Según los registros oficiales del caso, el hombre estranguló a Tolleson en su domicilio. Posteriormente, trasladó el cadáver a un terreno baldío detrás de su casa, donde lo ocultó durante varios días.
Un jurado lo halló culpable de asesinato con agravantes, lo que derivó en la sentencia de muerte. Este caso se convirtió en uno de los más notorios del sistema judicial texano en ese año, y desde entonces ha sido citado como ejemplo de la aplicación rigurosa de la pena capital en el sur de Estados Unidos.
Defensa legal del asesino intentó cambiar condena a cadena perpetua
La defensa legal de Moisés Sandoval Mendoza intentó, hasta el último momento, evitar que se cumpliera la sentencia de inyección letal. Su abogado argumentó ante las autoridades judiciales que el condenado, de 41 años, podría cumplir una cadena perpetua sin representar una amenaza.
No obstante, esta solicitud fue rechazada por los tribunales, en parte porque el historial penitenciario del acusado incluía incidentes de violencia. Además, la Corte Suprema de Estados Unidos desestimó revisar el caso, a pesar de que un recluso admitió haber provocado una pelea que inicialmente se le había atribuido a Sandoval Mendoza.