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Estados Unidos

Hamás culpa a EE. UU. de la guerra con Israel tras vetar resolución de cese al fuego en la ONU: "Un socio directo"

El movimiento Hamás responsabilizó a Estados Unidos de la escalada del conflicto en Gaza tras su veto en la ONU a una resolución que buscaba un cese al fuego inmediato e incondicional, calificándolo como un "socio directo" de Israel.



La organización Hamás acusó a Estados Unidos de generar el conflicto ante Israel. Foto: Composición LR
La organización Hamás acusó a Estados Unidos de generar el conflicto ante Israel. Foto: Composición LR

El movimiento palestino Hamás acusó a Estados Unidos de ser un "socio directo" de Israel en lo que califican como una "guerra genocida" en la Franja de Gaza. Esta reacción llegó después de que Washington vetara un proyecto de resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que pedía un cese al fuego inmediato y la liberación de todos los rehenes sin condiciones previas. Hamás afirmó que este veto confirma el apoyo incondicional de EE. UU. a Israel, acusándolo de ser responsable de la "limpieza étnica" que aseguran ocurre en el territorio palestino.

El texto vetado en la ONU había sido propuesto con el objetivo de detener la violencia que ha dejado miles de víctimas civiles en Gaza. Sin embargo, el representante de Estados Unidos ante la ONU, Robert Wood, argumentó que el cese al fuego no debería desvincularse de la liberación de los rehenes retenidos por Hamás. "Debe haber una relación directa entre el alto al fuego y la liberación de los rehenes", aseguró Wood.

¿Por qué EE. UU. vetó la resolución en la ONU?

El veto estadounidense se basó en la negativa a apoyar un cese al fuego que no incluyera la liberación inmediata de los rehenes capturados por Hamás durante el conflicto. Según el embajador adjunto de EE. UU. ante la ONU, la postura del país refleja su compromiso con la seguridad de Israel y la necesidad de abordar el problema de los rehenes como prioridad. "Un alto al fuego unilateral no garantiza la resolución de la crisis humanitaria ni la protección de los derechos de las víctimas", afirmó Wood.

Estados Unidos, como principal aliado de Israel, ha sido consistente en su rechazo a cualquier medida que considere perjudicial para los intereses de su socio en Medio Oriente. Este veto es el noveno que ejerce EE. UU. desde que comenzó el conflicto en Gaza, lo que refleja la influencia política que tiene el país en la toma de decisiones dentro del Consejo de Seguridad.

Las acusaciones de Hamás contra Washington

Hamás emitió un comunicado en el que afirmó que Estados Unidos no solo apoya a Israel militarmente, sino que también lo respalda diplomáticamente en organismos internacionales. Según el movimiento palestino, el veto en la ONU es una muestra clara de que Washington es parte activa en lo que califican como un "genocidio" contra el pueblo palestino. "Estados Unidos ha demostrado que es un cómplice en esta agresión, destruyendo vidas civiles y avalando la ocupación israelí", señalaron.

Además, Hamás acusó a EE. UU. de obstaculizar cualquier esfuerzo internacional para encontrar una solución pacífica al conflicto. Esta postura ha sido criticada por varios países, incluidos aliados europeos, quienes consideran que un cese al fuego incondicional es esencial para aliviar la grave crisis humanitaria en Gaza.

Hamás emitió un comunicado en el que afirma que apoya directamente a Israel. Foto: AFP

Hamás emitió un comunicado en el que afirma que apoya directamente a Israel. Foto: AFP

¿Qué implica este veto para Gaza?

El veto de Estados Unidos dificulta la posibilidad de un cese al fuego a corto plazo, lo que prolonga la violencia en la región. Según informes de organizaciones humanitarias, la situación en Gaza es insostenible: los hospitales están desbordados, el acceso a agua potable es limitado y miles de personas enfrentan desplazamientos forzados. La falta de un acuerdo para detener las hostilidades deja a millones de civiles expuestos a una crisis humanitaria sin precedentes.

Este veto también refuerza la percepción de que el Consejo de Seguridad de la ONU no puede actuar con eficacia en situaciones de conflicto debido a los intereses de sus miembros permanentes. Para Gaza, significa la continuidad de un conflicto que ha devastado su infraestructura y población, mientras las perspectivas de paz parecen cada vez más lejanas.