Notre Dame sin misa de Navidad
Catedral. Después de 216 años no habrá misa navideña, la joya arquitectónica está en reconstrucción. Aquí una crónica sobre el incendio.
París. EFE
Ante la mirada atónita de miles de turistas y parisienses, las llamas fueron devorando la cubierta de Notre Dame, una catástrofe simbólica que dejó perpleja a media humanidad, pendiente del incendio de uno de los monumentos más conocidos del planeta.
Hoy, ocho meses más tarde, la joya arquitectónica no realizará por primera vez la misa de Navidad, después de 216 años.
Según AFP, no hay ninguna ceremonia ni ninguna procesión previstas en las inmediaciones. Y la misa será oficiada a medianoche por el rector de la catedral, monseñor Patrick Chauvet, en la iglesia parisina Saint Germain l’Auxerrois, frente del museo del Louvre.
Trágico balance
El balance fue trágico: Notre Dame perdió toda su cubierta, el mítico “bosque” de madera, para cuya construcción había sido necesario talar toda una arboleda de más de mil robles y que durante siglos había escapado a las llamas.
También cayó la icónica aguja, insertada a mediados del siglo XIX en el entramado gótico por el arquitecto Eugène Viollet-le-Duc, revestida de plomo, en sustitución de la de madera que había lucido el templo hasta un siglo antes, desmontada por el deterioro sufrido por el paso del tiempo.
Operación relámpago
La intervención de una veintena de hombres salvó de las llamas a la torre norte en una operación relámpago en la que sus vidas corrieron peligro: de no haberlo evitado, habrían quedado sepultados en los escombros de la catedral.
Cuatro horas más tarde del inicio del incendio, el presidente francés, Emmanuel Macron, compareció desde las puertas de la catedral para decir: “Hemos salvado el edificio”.
Fue la primera buena noticia que se escuchó. Enseguida vino acompañada de otra: los bomberos habían penetrado en la catedral, bajo las llamas, para poner a salvo las obras de arte y el tesoro religioso que guardaba, en el que destaca la corona de espinas de Cristo.
En el momento del incendio, la cubierta de Notre Dame estaba en obras de restauración, envuelta en un espeso entramado de andamios. Aunque la investigación todavía no ha determinado las causas del incendio, esas obras son miradas con lupa.
Reconstrucción
En paralelo, mientras el Gobierno francés anunciaba un concurso internacional de arquitectura para la reconstrucción de la catedral, afloraron las propuestas de toda naturaleza sobre el tocado que debía lucir Notre Dame.
Con el paso de los meses, el interés sobre Notre Dame ha decaído. Francia parece haber abandonado la idea de tener lista la reconstrucción para 2024, como anunció Macron.