Bluesky, la nueva red social estadounidense creada por el fundador de Twitter, Jack Dorsey, está ganando popularidad como una alternativa para quienes buscan alejarse de la plataforma dirigida por Elon Musk. Con un diseño familiar que recuerda a su predecesora, esta innovadora propuesta descentralizada ofrece una experiencia de usuario diferente, lo que ha captado la atención de figuras del entretenimiento, medios de comunicación y usuarios descontentos con la dirección de X. Actualmente, Bluesky registra un crecimiento acelerado, con más de 16 millones de usuarios y una notable popularidad en aplicaciones móviles.
La descentralización es uno de los aspectos clave que diferencia a Bluesky. Esto permite a los usuarios gestionar sus datos en servidores independientes, aunque la mayoría opta por cuentas estándar bajo el dominio "bsky.social". A pesar de su reciente apertura al público, la plataforma ya ha experimentado picos de tráfico significativos, particularmente tras el anuncio de Elon Musk como miembro del gabinete de Donald Trump, lo que ha generado un éxodo de usuarios de X hacia Bluesky.
Estados Unidos es uno de los principales mercados de Bluesky, donde la red social ha logrado captar la atención de influencers y personalidades públicas. Foto: Wired
Aunque la interfaz de Bluesky es similar a la antigua Twitter, su principal atractivo es la descentralización. Los usuarios pueden registrar cuentas bajo dominios propios, brindando mayor control sobre su identidad y datos. Esto también fomenta un modelo de verificación más seguro, ya que instituciones como medios de comunicación podrían autorizar el uso de sus dominios, lo que garantizaría la autenticidad de las cuentas.
Además, Bluesky ha adoptado un enfoque sin publicidad para monetizar su plataforma. En lugar de anuncios, la red planea implementar suscripciones pagadas con funcionalidades premium, como la personalización de dominios. Este modelo busca diferenciarse de las redes sociales tradicionales, priorizando la experiencia del usuario sobre los ingresos publicitarios.
El ascenso de Bluesky no es casual. Las controversias en torno a X bajo la dirección de Elon Musk, desde los cambios en el algoritmo hasta su apoyo político, han motivado a millones de usuarios a buscar alternativas. Incluso instituciones como el diario británico The Guardian han anunciado su retiro de X por considerarla una plataforma "tóxica". Esta situación ha abierto una ventana de oportunidad para Bluesky, que se posiciona como una red más inclusiva y menos centralizada.
Con personalidades como Ben Stiller, Jamie Lee Curtis y Lizzo uniéndose a Bluesky, su futuro promete ser interesante. No obstante, para consolidarse como un verdadero competidor de X, la plataforma deberá mantener su crecimiento, desarrollar una estrategia financiera sostenible y seguir innovando en un mercado altamente competitivo.