La ciudad de Grapevine, en Texas, se ha ganado el título de 'capital navideña' gracias a su impresionante oferta de actividades festivas. Con más de 1.400 eventos programados durante 40 días, esta pequeña ciudad se convierte en un destino ideal para quienes buscan celebrar la Navidad de una manera única y mágica.
Ubicada en el área metropolitana de Dallas, Grapevine ofrece un espectáculo deslumbrante de luces, decoraciones gigantes y personajes animados que llenan las calles de alegría. Entre las actividades más destacadas se encuentra el Expreso al Polo Norte, una experiencia de 45 minutos que transporta a los visitantes a un mundo de fantasía navideña, ideal para los más pequeños de la casa.
Además de su famoso tren, Grapevine cuenta con una pista de patinaje en el centro de la ciudad, donde los entusiastas del hielo pueden disfrutar de una hora de diversión por un costo aproximado de US$20. La ciudad también ofrece una amplia variedad de tiendas, perfectas para realizar las compras navideñas en un ambiente festivo.
Si bien Grapevine es conocida por su celebración navideña, Texas ofrece otros destinos encantadores para disfrutar del espíritu festivo. Foto: difusión
Otro evento imperdible en la temporada navideña es el desfile de luces de Navidad en Fort Worth, Texas. Esta atracción es muy popular entre los locales y turistas, quienes se reúnen para admirar el imponente árbol de Navidad en la plaza. Este gigantesco abeto de 50 pies, adornado con 10,000 luces LED y decoraciones, se enciende cada 24 de noviembre, marcando el inicio de la temporada festiva.
Si bien Grapevine es conocida por su celebración navideña, Texas ofrece otros destinos encantadores para disfrutar del espíritu festivo. Wimberley, por ejemplo, es un pequeño pueblo que organiza un tradicional sendero de luces en el Teatro Emily Ann, iluminando más de 8 acres con un espectáculo visual impresionante.
Fredericksburg, con su herencia alemana, presenta un mercado navideño espectacular que ofrece una experiencia única. Por otro lado, San Antonio transforma su famoso Paseo del Río (River Walk) en un paraíso iluminado, donde los visitantes pueden navegar en botes decorados mientras disfrutan de la atmósfera festiva.