Estados Unidos es un país que se destaca por sobre muchos gracias a sus avances tecnológicos. No sorprende que, debido a ello, lidere junto a países como China y Rusia la carrera armamentista, al desarrollar nuevos recursos que podrían causar el fin del mundo o, incluso, ayudar a sobrevivir en este potencial escenario.
Una de sus creaciones es el E-4B Nightwatch, conocido como el 'avión del juicio final', una aeronave capaz de soportar un ataque nuclear y cuya existencia y renovación ha cobrado mayor relevancia debido a la actual coyuntura internacional.
E-4B Nightwatch de Estados Unidos, considerado el 'avión del juicio final' . Foto: USAF
El E-4B Nightwatch se desarrolló principalmente como un centro de operaciones aéreo sobrevivible (SAOC) para casos de emergencia o situaciones extremas, incluidos conflictos nucleares.
Su diseño está basado en el Boeing 747-200, un avión comercial de fuselaje ancho que permite operar a altitudes y distancias superiores a las capacidades de aeronaves convencionales.
Sin embargo, gracias a las mejoras hechas constantemente, es capaz de mantenerse en vuelo luego de un ataque nuclear, puede resistir pulsos electromagnéticos, transportar hasta 112 personas y está equipado con sistemas de comunicación avanzados que le permiten mantener conectividad total en caso de una crisis nacional o hasta global.
Este avión no solo es un ejemplo de la tecnología militar, que, según dicen, es capaz de responder a cualquier momento del día y operar hasta 12 horas continuas, sino también el reflejo de la previsión estratégica de los Estados Unidos.
PUEDES VER: La impresionante ciudad del futuro que se creará en Estados Unidos y estará lista para el 2030
El E-4B Nightwatch es una versión militarizada del Boeing 747-200. Sus características incluyen lo siguiente:
Diseñado como un centro de mando y control aéreo, este avión proporciona comunicación y dirección estratégica incluso en situaciones extremas.
Ilustración del Interior de un E-4B Nightwatch. Creador: Leo Delauncey.
PUEDES VER: Este es el país con la bomba nuclear más poderosa de la historia: no es Estados Unidos ni China
A pesar de las increíbles capacidades y equipamiento del 'avión del juicio final', continúa siendo una aeronave comercial de 1974. Es por ello, y por la revelación de que Rusia había adquirido una nueva flota de aviones similares, que la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha destinado US$13.000 millones para la producción de modernos E-4B Nightwatch.
PUEDES VER: El bombardero más evolucionado del mundo está en América: transporta bombas nucleares sin ser detectado
Sierra Nevada Corporation, una empresa reconocida en la industria aeroespacial por trabajar con la NASA, ha sido la elegida para llevar a cabo la actualización de la flota del E-4B.
Con un contrato que se extiende hasta 2036, esta empresa se encargará de entregar aviones que no solo cumplan con los estándares actuales de tecnología y seguridad, sino que también establezcan nuevos parámetros de rendimiento y resistencia.
El compromiso financiero inicial ha llegado a los US$13.000 millones para investigación, desarrollo, pruebas y evaluación. Asimismo, se sabe que la entrega de los aviones está programada para julio del 2036, asegurando su condición frente a naciones rivales y la constante renovación de sus equipos.
PUEDES VER: Así fue la increíble ‘lluvia’ de peces que cayó sobre Irán: ¿a qué se debe este inusual fenómeno?
No solo Estados Unidos ha desarrollado aeronaves con capacidades para enfrentar emergencias de gran escala. Rusia y China, por ejemplo, también han invertido en aviones de mando y control que pueden operar bajo condiciones extremas. Estos aviones, aunque diferentes en especificaciones y propósitos, representan esfuerzos similares para asegurar la gobernabilidad y control en tiempos de crisis.
El avión del juicio final ruso, conocido también como 'Kremlin volador'. Aunque no muchas veces se lo ha visto, a diferencia de los Nightwatch de Estado Unidos, se lo ha visto en diversas ocasiones en el hangar y hasta sobrevolando Moscú por el 'Día de la Victoria'.
Aunque son igual de poderosos que los de Estados Unidos, son tecnología de la Guerra Fría, por lo que ahora el Kremlin está renovando la flota con una versión más moderna y de mayores capacidades.